El Ayuntamiento se toma muy en serio el «estado de guerra» ocasionado por los petardos

Inicialmente iba a ser una reivindicación de los vecinos de la zona centro de la ciudad. Sin embargo, poniendo el asunto en común con otros colectivos, se dieron cuenta de que todos podían presentar puntualmente un problema de contaminación acústica, explica Francisco, portavoz de la Plataforma. Incluso, el uso de una traca ha llegado a matar a la mascota de un vecino, denuncia Francisco, cuyo perro tarda tres días en querer volver a salir de casa tras asustarse por el uso de una traca. «A veces parece que estamos en un estado de guerra», critica.

Y es que llegan a celebrarse hasta seis bodas cada fin de semana a las puertas de unos vecinos que deben de sufrir esa pirotecnia que se ha convertido en tradición. «¿Por qué se tiene que enterar todo Burgos y parte de la provincia de que una pareja se ha casado?» se pregunta el portavoz, que reflexiona sobre las molestias gratuitas que ocasiona en todo el entorno. Desde la contaminación sonora, medioambiental (por la química) y de salud en mascotas (que lo sufren especialmente), pero también en personas mayores y niños. En este último caso, Francisco pone como ejemplo a un niño con autismo cuya madre tarda cuatro horas en tranquilizar tras el estado de ansiedad que le producen los petardos.

Aún con todo esto, la Plataforma únicamenre pide que se cumpla una normativa que es muy clara, pero que será concretada, tras haberse reunido con Gema Conde, concejal de Seguridad Ciudadana, y Fernando Sedano, intendente de la Policía Local. También se han reunido con Carolina Blasco, titular de Medioambiente, y con el resto de fuerzas políticas. Con todo ello, la Plataforma nace con fuerza con el objetivo de que se prohíba por completo el uso de pirotecnia sin control.

No obstante, son conscientes de que en momentos señalados, como los Sampedros, con los fuegos artificiales, o la Nochevieja (está permitida los quince primeros minutos del año) son citas en las que es muy difícil acabar con el estruendo. Sin embargo, Francisco explica que al tratarse de momentos concretos y previstos, se toman medidas para que los vecinos y su entorno se vean lo menos afectados posible.

Por otro lado, la Plataforma trabaja en la grabación de un corto, que correrá a cargo de Francisco Álvarez, y que se utilizará como material didáctico con el que acudir a las aulas burgalesas. El objetivo es ir concienciando a la población en la erradicación de esta forma de contaminación acústica que afecta a muchos más de los que puede parecer.