Una avería causa una hora de retraso en un tren Burgos-Valladolid

Las preguntas a los trabajadores de Renfe se sucedían mientras la incógnita de lo sucedido seguía creciendo entre el pasaje a la vez que se dilataba la espera con el horario de llegada ya rebasado. Minutos más tarde, los viajeros recibían una comunicación que despejaba algunas de sus dudas y fijaba la espera que iban a tener que realizar para llegar a su destino: 35 minutos.

Desde Renfe han explicado que el retraso sufrido por el Alvia 632 había sido causado por una «incidencia técnica de equipos de a bordo» durante el recorrido. Así, la empresa de transporte ferroviario justificaba la espera ante la resignación de los pasajeros, que asumían el percance con paciencia.

Pero, por otro lado, en los paneles de la estación Rosa Manzano aparecía una nueva hora de llegada que marcaba casi el doble de tiempo de retraso que el anticipado por correo electrónico: 60 minutos.

Con el desconcierto lógico al exponerse dos horas distintas de llegada del tren, los pasajeros recibieron un segundo mensaje en el que, en este caso, se hablaba de esa hora de retraso y se destacaba que la causa por la que se había producido la tardanza tenía relación con «una incidencia en las infraestructura de Adif».

Finalmente, y con la entendible duda de a qué hora entraría el tren en la estación burgalesa, el Alvia 632 que cubría el recorrido entre Barcelona y Salamanca aparecía por el anden 2 para terminar, al fin, recogiendo a los pasajeros con destino Valladolid una hora después.