La ampliación del Instituto de Medicina Legal de Burgos se ralentiza y no concluirá hasta septiembre de 2021

La UTE Construcciones Pascual-Eléctricas Antares, adjudicataria del proyecto que cuenta con una inversión de 200.000 euros, comenzó a trabajar el 17 d enero. Las obras tenían una duración de seis meses, así que si todo hubiera ido según lo previsto ya tendrían incluso que estar concluidas. Sin embargo, no ha sido así, reconocen en el Ministerio de Justicia, responsable de la actuación.

La crisis sanitaria de la covid-19 obligó a suspender los trabajos durante un tiempo, como en otras muchas obras públicas y privadas. No obstante, lo que ha supuesto un mayor contratiempo han sido los problemas de filtraciones de agua detectados al inicio de las obras, lo que ha obligado a realizar un modificado del proyecto. De este modo, «los trabajos se han ralentizado y su finalización está prevista para la primavera de 2021», explica Justicia.

Se trata de un retraso más para un proyecto que lleva años pendiente de ejecución, y muy necesario. Las actuales dependencias del Instituto de Medicina Legal de Burgos, que presta servicio a Segovia, Soria y Ávila también, ocupan 332 metros cuadrados en el Divino Valles. La Diputación de Burgos ha cedido otros 596, correspondientes a la antigua área de Medicina Nuclear, que se encuentra anexa a instituto.

El proyecto de ampliación en el que se trabaja ahora solo utilizará 318 metros cuadrados, reservando el resto del espacio para futuras intervenciones, si es que se requieren. Se van a crear cuatro despachos médicos, dos psicosociales con asistencia a víctimas y otros dos para atención a menores, una sala de exploración, otra de espera para padres, una de interacción, aseos y la correspondiente conexión.