CC OO afirma que Ambuibérica les está «tomando el pelo» y no descarta una huelga en agosto

Marcos Citores, de CC OO, ha insistido en que la propuesta presentada «no vale», pues debe ser algo más serio y concreto, en el que queden definidos los turnos de trabajo, los horarios, cuántos trabajadores se necesitan por turno, qué tipo de rotación se va a aplicar... Actualmente, los cuadrantes funcionan bajo demanda, con cambios constantes, avisando de horas de entrada y de salida sin suficiente antelación e impidiendo la conciliación de la vida laboral y familiar.

Desde Ambuibérica, en la que está integrada Ambulancias Rodrigo, justifican esa desregulación en problemas técnicos, dificultades para concretar un calendario laboral que se ajuste a las necesidades del servicio. Citores entiende que, si bien existen picos de trabajo y servicios no programados, es posible cerrar un calendario laboral, que debería ser anual, y un cuadrante de turnos, para «ser eficientes y eficaces».

No se puede pretender, por ejemplo, implantar turnos partidos para evitar el pago de dietas o avisar a los trabajadores a las ocho o las nueve de la noche sobre su hora de entrada al día siguiente. «Están acostumbrados a trabajar a demanda», pues así se hacía en Ambulancias Rodrigo, pero el modelo hay que cambiarlo. La mayor parte de los servicios son programados, así que se puede cerrar un cuadrante, dejando margen para las necesidades a demanda.

Por todo ello, el sindicato ha exigido a la empresa que presente una propuesta de calendario, con turnos de trabajo, horarios y número de trabajadores, en la primera quincena de agosto; si no cumplen con la petición, se podría convocar una huelga a patir del 15 de agosto. Marcos Citores insiste en que ellos han negociado de buena fe, pero no así Ambuibérica, pese a lo cual en el SERLA han preferido conceder un margen de confianza antes de dar por rotas las negociaciones.

El responsable sindical recuerda que los trabajadores de Ambulancias Rodrigo trabajan bajo presión, en una situación de estrés preocupante, que conlleva no pocas bajas laborales. Tienen jornadas maratonianas, desregularizadas y se les controla exhaustivamente los horarios de transporte y, pese a ello, la empresa «no favorece la conciliación». De ahí que CC OO no descarte acudir a la Inspección de Trabajo para que realice un informe sobre riesgos psicosociales.