Adiós al 'Jacoseto' de Burgos

La escultura, de 12 metros de altura, 60 toneladas de peso y decorada con jazmines de invierno, era un homenaje al año Xacobeo 2021. Se trata de una iniciativa de la Fundación VIII Centenario de la Catedral para rendir homenaje al Camino de Santiago. Así, en este punto de la capital burgalesa, se unían a simple vista los tres Patrimonios de la Humanidad con los que cuenta Burgos: el Camino de Santiago, los yacimientos de Atapuerca y la Catedral.

Aunque el pleno del Ayuntamiento de Burgos acordó mantener este peregrino gigante, obra del artista Cristino Díez, hasta el 31 de diciembre, este martes 29 de noviembre ha comenzado el desmontaje de la escultura.

Desde el primer momento se supo que el 'Jacoseto' iba a ser algo momentáneo, que no se quedaría ahí para siempre. Pero también desde el primer momento empezó la polémica.

El peregrino floral no dejó indiferente a nadie. En las redes sociales comenzaron los comentarios y se materializaron en una petición en la plataforma change.org donde un usuario, bajo el seudónimo de Rodrigo Díaz de Vivar, inició una campaña para acabar «con el sufrimiento» del 'Jacoseto'. Se pretendía recaudar fondos para prenderlo fuego. «Creemos que es lo mejor para él y para los burgaleses que tenemos que mirarle a los ojos cuando estamos dando un paseo un domingo por la tarde», recogía la petición

Recientemente, el grupo municipal Podemos propuso retirar esta escultura vegetal del peregrino por considerar que no estaba en un lugar idóneo y restaba atractivo al paisaje. Además, se añadía que no había cuajado la iniciativa entre la población. En ese pleno, donde se acordó que la Comisión de Movilidad estudiará los elementos que entorpecen la vía pública, se acordó que el 'Jacoseto' permanecería en ese lugar hasta el 31 de diciembre.

Pero su retirada ha comenzado antes. La retirada llega antes de tiempo y la inauguración, por su parte, llegó con retraso. La inauguración del 'Jacoseto' se produjo el sábado 23 de julio, nueve meses después de su instalación. Estaba más cerca su final que su comienzo. Se eligió ese día por estar cercano al 25 de julio, cuando se celebra el Día de Santiago.