Tiene un accidente, se niega a la prueba de alcoholemia, agrede a los agentes y acaba detenido

Cuando se personaron en el lugar de los hechos los agentes de la Unidad de Protección Ciudadana, observaron que el conductor aún se encontraba en el interior del vehículo y con el motor en marcha. Los policías procedieron a su identificación y a apagar el motor del vehículo, retirando las llaves en prevención, ya que el conductor presentaba síntomas compatibles de estar bajo la influencia de las bebidas alcohólicas o drogas.

En reiteradas ocasiones los agentes le informaron de la obligatoriedad a someterse a la prueba de alcoholemia, negándose en todas y cada una de ellas. Entonces la Unidad de Atestados instruyó diligencias por la comisión de un presunto delito contra la Seguridad Vial por la negativa.

En el posterior registro corporal se encontró una sustancia estupefaciente compatible con marihuana, la cual quedó intervenida y por la que se levantó acta de infracción. Suponiendo que pudiera llevar más sustancias en el vehículo, se pidió la presencia de la UCIR, Unidad Canina de la Policía Local.

Noticias relacionadas

Dos detenidos por robo con violencia a un hombre tras la salida de una discoteca en Burgos

BURGOSconecta

A prisión un joven por dejar en la UCI a otro tras un golpe en la cabeza

BURGOSconecta

Herido un ciclista al esquivar un camión y caer por un terraplén en Burgos

Sara Sendino

Ocho heridos en tres accidentes de tráfico por alcance en Burgos

Alejandro Rodríguez

Cuando la UCIR llegó al lugar con intención de intervenir en el interior del vehículo, los agentes fueron sorprendidos de manera violenta y muy agresiva por el conductor del mismo. Este arremetió contra uno de los policías golpeándole para, acto seguido, salir a la carrera huyendo del lugar.

Cuando fue interceptado por otro de los agentes, arremetió de nuevo golpeándole en el rostro, siendo finalmente reducido y detenido como presunto autor de un delito de atentado contra los agentes de la autoridad.

La Policía Local mantiene que, tanto en el traslado en el vehículo policial como en los calabozos, el detenido presentaba una actitud muy agresiva y desafiante. Además, el varón insultaba constantemente e intentaba golpear a los agentes. Escupió en reiteradas ocasiones, golpeando y dañando el mobiliario de las instalaciones así como el interior del vehículo patrulla.