¿Un mundo sin niños? Unicef prevé que la población infantil caiga a finales de siglo

¿Un mundo sin niños? Este es el futuro que se vislumbra y no a muy largo plazo en algunas regiones del planeta. 2023 fue un año clave en la historia de la humanidad, ya que por primera vez en la existencia de la humanidad la especie no se reemplazó. La tendencia es imparable: la humanidad se va a encoger.

En 2050, más de tres cuartas partes de los países tendrán tasas de fertilidad tan bajas que no podrán mantener el tamaño de su población. Las previsiones para final del siglo son peores, el porcentaje de países con déficit de nacimientos se eleva hasta el 97%. Poco a poco la presencia de los más pequeños se va reduciendo. «Es alarmante a nivel mundial», destaca Unicef en su informe 'Estado Mundial de la Infancia 2024: el futuro de la infancia en un mundo cambiante'.

Según los cálculos de esta organización dependiente de Naciones Unidas, la población infantil disminuirá por debajo del 17% en Europa Occidental y en Asia Oriental en 2050 con respecto al inicio de este siglo cuando el porcentaje era del 20% y 29% respectivamente. La caída se produce en cada uno de los continentes. «Estos cambios plantean retos, porque los recursos y necesidades de la sociedad van a variar con una población de edad más avanzada», alerta Unicef.

El informe también pone de manifiesto los retos a los que se enfrentan los jóvenes del mañana. «Tenemos que adaptar las medidas medioambientales para proteger su salud», revelan los autores de la investigación. En la segunda mitad del S.XXI, las proyecciones climáticas apuntan a que las crisis relacionadas con el calentamiento global serán más frecuentes y generalizadas que en la actualidad. «El número de niños afectados por olas de calor e inundaciones extremas se multiplicará por ocho», detalla Unicef.

La investigación reconoce que las tecnologías de vanguardia, como la inteligencia artificial (IA),presentan tanto beneficios como riesgos para los niños,niñas y adolescentes,que ya están interactuando con la IA integrada en aplicaciones, juguetes, asistentes virtuales, juegos y software de aprendizaje. Sin embargo, la brecha digital sigue siendo enorme. En 2024, más del 95% de los habitantes de los países de renta alta están conectados a internet, frente a sólo el 26% en los países de renta baja.

El informe señala que un gran porcentaje de jóvenes de países de ingresos bajos y medios tiene dificultades para acceder a las competencias digitales, lo que repercutirá en su capacidad para utilizar de forma eficaz y responsable las herramientas digitales en la educación y en los futuros puestos de trabajo.

Estas barreras suelen estar relacionadas con el entorno socioeconómico, el género, la lengua y la accesibilidad. No obstante, el informe también prevé un aumento de la esperanza de vida al nacer, y que continúen los avances de los últimos cien años en el acceso a la educación(se espera que casi el 96% de los niños y niñas de todo el mundo hayan completado al menos educación primaria en la década de 2050, frente al 80% en la década de 2000).

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