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María José Barrero
Martes, 19 de noviembre 2024
«El propósito siempre empieza con una conexión. Yo soy astrofísico, trabajé en la NASA, y siempre me preguntan qué hago en una compañía dermocosmética como esta. Pero en Isdin trabajamos desarrollando productos para protegernos de una estrella cercana, el sol; la piel se renueva cada 28 días, lo que la Luna tarda en orbitar la Tierra; y nuestra piel tiene cien mil millones de células, tantas como estrellas hay en una galaxia», explicó Juan Naya en el I Foro Líderes con Propósito, una encuentro único entre pensadores, representantes institucionales y los líderes de compañías punteras españolas.
Esta anécdota personal que Naya contó este encuentro organizado por Vocento sobre el propósito, el liderazgo humanista y la cultura corporativa le sirvió al CEO de Isdin para ejemplificar la necesidad de conectar la vida personal y la profesional en busca de un propósito.
En el momento actual, plagado de cambios e incertidumbres, «las empresas tenemos la oportunidad increíble de convertirnos en un faro para la sociedad; de ser parte de la solución –recalcó–. En Isdin hemos dado ese paso. Pero antes de ponernos a trabajar para un futuro mejor, hay que pensar qué rol podemos asumir en función de nuestras fortalezas. Y el nuestro es la salud: inspirar a las personas a disfrutar de vidas saludables, felices y bonitas». Ese ese el propósito de su compañía, y es el valor que la mueve cada día.
Tras asegurar que «el propósito no es un fin, sino un medio para que las personas demos sentido a lo que hacemos», el CEO de la compañía dermocosmética barcelonesa expuso dos de las iniciativas con las que quiere ir más allá. La primera es el movimiento 'Love your skin', que pretende alcanzar un futuro sin cáncer de piel, intentando que la gente «conozca su piel, porque aquello que conoces lo amas, y lo que amas, lo cuidas. Llevamos 30 años concienciando en las escuelas, con los héroes deportivos, formando a dermatólogos, divulgando, con proyectos solidarios...». Uno de estos últimos se desarrolla en Mozambique, un país de 32 millones de habitantes en el que solo hay 20 dermatólogos y un importante porcentaje de población albina, con un 95 por ciento de incidencia de cáncer de piel. Allí cada año llevan a 25 médicos voluntarios, que realizan más de 200 cirugías, y se donan más de 120.000 fotoprotectores.
En su otra iniciativa, 'Love your planet', «estamos creando la Bluewave Alliance, con científicos marinos, empresas y soñadores para contribuir a un Mediterráneo mejor. Nuestro objetivo es conseguir que, en 2030, el 30 por ciento de nuestro mar esté protegido», a través de un movimiento de concienciación, Seaspore, en el que participen científicos, artistas e ingenieros.
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