Burgos obtiene un “aprobado” en accesibilidad, pero aún tiene margen de mejora
El borrador del I Plan de Accesibilidad concluye que Burgos cumple en términos generales con los criterios de accesibilidad física, pero suspende en otros ámbitos
Se deberían abordar mejoras en edificios municipales y en la accesibilidad de colectivos hasta ahora “olvidados”, como sordos o personas con discapacidad intelectual
Burgos es una ciudad relativamente accesible, pero aún tiene mucho margen de mejora. Esa es sin duda una de las principales conclusiones puestas sobre la mesa por la empresa 8a, encargada de la redacción del I Plan de Accesibilidad de la ciudad, del cual ya hay un borrador. Un borrador que ha sido presentado en sociedad esta misma mañana y en el que ya se ha esbozado la situación actual en la materia y se han identificado las fortalezas y debilidades de todos los ámbitos urbanos que se han estudiado.
Los diferentes colectivos podrán presentar propuestas de mejora antes del 30 de septiembre
En este sentido, Fernando García-Ochoa, responsable de la empresa, ha asegurado que la accesibilidad de la ciudad está “por encima de la media” de la de las ciudades que ha estudiado hasta ahora, que son muchas. Es decir, que Burgos obtiene un “aprobado” en el exhaustivo análisis efectuado durante los últimos meses. A ello ayuda, según García-Ochoa, la propia geografía y morfología de la ciudad, con pocas cuestas y calles generalmente anchas. Sin embargo, como todo en esta vida, aún hay muchas cosas que podrían -y deberían mejorar-.
A este respecto, ha abundado, los espacios públicos y los edificios municipales cumplen en su gran mayoría los parámetros de accesibilidad física que impone actualmente la ley. Esto es, que autobuses, paradas, aceras, rebajes, acceso a edificios y demás están preparados para su uso por parte de personas con movilidad reducida. Menos grado de cumplimiento, en muchos casos nulo, se ha observado en otros parámetros de accesibilidad, como los vinculados a extranjeros, personas ciegas o sordas o personas con discapacidad intelectual.
En este ámbito concreto, Burgos debe mejorar, y mucho, tal y como deben hacer la gran mayoría de ciudades del país, ha resumido García-Ochoa. Así, falta “comunicación sensorial” para colectivos “prácticamente olvidados” en materia de urbanismo y accesibilidad, ha añadido.
Edificios
Además, en el caso concreto de los edificios municipales de uso público se ha observado una situación muy heterogénea. Y es que, los inmuebles más nuevos cumplen bastante más con los criterios de accesibilidad que los viejos. Así, el edificio municipal más accesible de la ciudad (y no del todo) es el Fórum Evolución, mientras que el Monasterio de San Juan puede pasar por ser el menos accesible. Entre medias, se sitúan inmuebles como los centros cívicos, cuya reciente construcción les permite adaptarse a una normativa que, eso sí, está en constante evolución.
De todos y cada uno de los edificios municipales, así como de los diferentes espacios públicos de la ciudad se ha elaborado una ficha independiente en la que se han desglosado deficiencias y necesidades, así como presupuestos “estimativos” de lo que podría costar atajar dichas deficiencias. En términos generales, y sin entrar al detalle de cada uno, se plantean presupuestos medios de unos 50.000 euros.
Aportaciones
Ahora, una vez puesto sobre la mesa el borrador, de unos 500 folios de extensión, el Ayuntamiento ha abierto un plazo de presentación de propuestas por parte de los colectivos vinculados a la materia, así como los grupos políticos y cualquier otro interesado en plantear aportaciones. Una vez completada esa fase, que finalizará el 30 de septiembre, la empresa afrontará la redacción del documento definitivo, que verá la luz a finales de año.
A partir de ahí, la ejecución de las mejoras propuestas en el documento quedará supeditada a los presupuestos. Y es que, la idea del Equipo de Gobierno pasa por dividir la ejecución del plan en cuatro anualidades, y “si no hay presupuestos municipales no se podrá desarrollar”, ha subrayado la concejala Gema Conde.