Dinamarca, un país lleno de posibilidades

Dinamarca es uno de los países con menor tasa de paro de toda Europa, además de ser un destino turístico de excepción y contar con un gran sistema educativo

Dinamarca, un país lleno de posibilidades

Con algo más de 5 millones y medio de habitantes, Dinamarca está considerado uno de los mejores países del mundo para vivir y donde los ciudadanos dicen ser más felices. Sin apenas corrupción, la tasa de empleo obtiene en el país nórdico uno de los mejores resultados: su índice de paro no llega al 6 por ciento. Este es uno de los motivos que más atrae a los jóvenes del sur de Europa, que ante la crisis económica que sufre su país, deciden partir al norte en busca de trabajo o de una mejor educación, como le ocurrió a Sara López, una joven española que trabaja desde hace unos meses en la empresa danesa de joyas para hombre, Trendhim.

Esta star-up, especializada en relojes de hombre, buscaba abrirse un hueco en el mercado internacional y fue así como Sara López optó al puesto de responsable del departamento de marketing del mercado español. Sin embargo, la aventura de esta joven en el país danés comenzó tiempo antes. Tras reflexionar sobre dónde le gustaría cursar sus estudios universitarios, Sara se decantó por la ciudad de Horsens, donde se matriculó en ingeniería informática. Desde el primer día se quedó prendada de Dinamarca y de su sistema educativo. Lo que más le gustó, entre otras cosas, es que en las aulas danesas se valora y se refuerza la participación en las clases y el trabajo en grupo, cualidades muy valoradas a la hora de entrar en el mercado laboral.

Además de la educación y de las posibilidades laborales, Dinamarca es un país abierto al turismo. A pesar de las temperaturas, en general más gélidas que en el sur de Europa, Dinamarca recibe cada año millones de turistas. De hecho, en 2015, el turismo tuvo unos ingresos en la economía danesa equivalentes a más de 6.000 millones de dólares.

El país, que presume de una historia forjada en su pasado vikingo, ofrece toda una variedad artística, gastronómica y paisajística. La Sirenita, el Tivoli (el parque de atracciones más antiguo de Europa), el Nyhavn (el canal más famoso de Copenhague) o el Kastellet (el parque que fue en su día parte de la fortaleza defensiva de la ciudad) son algunas de las atracciones más admiradas por los turistas que visitan la capital danesa. Además, ciudades como Roskilde, Aarhus u Odense atraen cada vez a más visitantes por su encanto.

En todas estas zonas se puede gozar de la gastronomía de Dinamarca, cada vez más popular. En ella se encuentran influencias de la cocina francesa, italiana y de países fronterizos como Suecia, Noruega y Alemania. A pesar de que los platos típicos varían según la zona del país, la cocina danesa destaca por la incorporación del pescado, de la carne y del marisco, junto con el uso de verduras, ligado al pasado agrícola del país.

Por otra parte, Dinamarca fue catalogada en 2016 como uno de los mejores países para hacer negocios, según la revista Forbes. De los 11 indicadores utilizados para clasificar los países de esa categoría, el danés se clasificó entre los 20 primeros en 10 de ellos.