Carlos Barbero impone una vez más su ley en Clunia
El ciclista burgalés del Movistar repite victoria en Clunia, donde ya ganó en 2015, imponiéndose en el sprint a Gianni Moscon y Julian Alaphilippe
Barbero suma así su quinta victoria de la temporada
Mikel Landa defenderá mañana el liderato en las Lagunas de Neila
Carlos Barbero volvió hoy a imponer su ley en Clunia. El ciclista burgalés del Movistar, que ya en 2015 se llevó la victoria de etapa en el sprint de los yacimientos de la ciudad romana, tiró de experiencia, esperó su oportunidad y se impuso a dos especialistas como Gianni Moscon (SKY) y Julian Alaphilippe (Quick Step), que pecaron de cierta precipitación en la rampa de acceso a los yacimientos. Primero uno y luego el otro, intentaron marcharse a falta de casi quinientos metros. Barbero, por el contrario, aguantó a rueda hasta que a falta de unos 200 metros les dejó clavados.
Barbero suma ya cinco triunfos en esta temporada
Una victoria de categoría que supone todo un broche de oro para el corredor burgalés, que ya suma cinco triunfos esta temporada, incluido el Circuito de Getxo que se adjudicó hace apenas unos días.
Sin embargo, la victoria de Barbero no inquieta para nada a un Mikel Landa que continúa vistiendo el maillot morado y que mañana intentará defender el liderato en la quinta y definitiva etapa de la Vuelta, que volverá a ascender a las Lagunas de Neila.
Fuga infructuosa
Nada más arrancar, un grupo de cuatro corredores consiguió saltar del pelotón y consolidar la fuga de la jornada. En ella estaban Antoine Duchesne (Direct Energie), Etienne Van Empel (Roompot), Marcos Jurado (Burgos BH) y, cómo no, Benjamin King (Dimension Data), que se ha dejado ver, y mucho, en esta edición de la ronda burgalesa. Poco después, Julen Irizar saltaba también del pelotón, pero no conseguía conectar con la escapada y acababa dándose por vencido en el kilómetro 14.
A partir de ese momento, el escenario cambió poco o nada. Los cuatro de delante consiguieron marcharse, alcanzando ventajas de casi 4 minutos respecto al grupo principal, pero en ningún momento dio la sensación de que fueran capaces de llegar. Por detrás, el SKY dejaba hacer, controlando con solvencia la carrera y protegiendo al líder, Mikel Landa, que mañana intentará defender el maillot morado en las Lagunas de Neila.
El conjunto británico acabó recibiendo la ayuda de los equipos de los sprinters, que a falta de cuarenta kilómetros endurecieron la marcha para evitar sorpresas en una aproximación en la que el viento amenazaba con causar problemas. Así, en un abrir y cerrar de ojos, la ventaja se redujo a menos de un minuto, momento en el que Remy di Gregorio (elko Marseille) y Oscar Riesenbeek (Roompot) intentaron marcharse del pelotón principal en busca de los fugados sin suerte.
El ímpetu del pelotón, comandado ya por los equipos de los sprinters, acabó neutralizando a los escapados a falta de 12 kilómetros. El SKY, el Movistar, el Cofidis y el Quick Step iniciaron entonces una bonita batalla para asegurar la aproximación y dejar bien colocados a sus hombres fuertes antes del último giro en Peñalba de Castro.
Sprint medido
A partir de ese momento, ya en el último kilómetro, la carrera terminó de romperse. Primero lo intentó Moscon, que se llevó a rueda a Alaphilippe y a Barbero. Luego fue el francés el que probó fortuna. Pero acabó siendo Barbero quien, echando mano de su mayor conocimiento del terreno, remató la faena, dejando clavados a sus dos rivales a falta de 200 metros y adjudicándose una victoria de nivel.
Mañana, la Vuelta a Burgos pondrá punto y final a su trigésimo novena edición con la ya tradicional ascensión a las Lagunas de Neila. Una etapa que, eso sí, no se antoja tan dura como suele ser habitual y en la Mikel Landa intentará sentenciar la victoria final. De momento, el ciclista alavés arrancará la jornada con 27 segundos de ventaja sobre David de la Cruz.