Diputación renueva su compromiso con Proyecto Hombre con 193.720 euros
El presidente de la Diputación y el director de Proyecto Hombre renuevan el convenio de colaboración, que permitirá financiar parte de los programas de la organización
Manuel Fuentes hace un “llamamiento” a la responsabilidad social para dejar de “normalizar” el consumo de cannabis y alcohol entre menores
El presidente de la Diputación de Burgos, César Rico, y el director de Proyecto Hombre, Manuel Fuentes, han renovado hoy el convenio de colaboración que mantienen ambas entidades desde hace años para consolidar el trabajo de atención y prevención de las drogodependencias. En esta ocasión, la aportación de la Institución Provincial se incrementa hasta los 193.720 euros, esto es, unos 3.000 euros más que en 2016.
La Diputación incrementa el apoyo a Proyecto Hombre en 3.000 euros
A juicio de Rico, este incremento da cuenta del “compromiso social” que mantiene la Diputación con diferentes organizaciones que permiten cubrir las necesidades de los más vulnerables en aquellos ámbitos a los que la propia Diputación no llega. De hecho, la colaboración con Proyecto Hombre es una de las más asentadas y reconocibles de todas las que mantiene la Institución Provincial a lo largo y ancho de Burgos.
En este sentido, Fuentes ha querido agradecer una vez más el apoyo de la Diputación, ya que con el dinero aportado se podrán financiar parte de los programas que desarrolla Proyecto Hombre en Burgos, que son muchos y muy variados. A este respecto, el director de la organización ha aprovechado la ocasión para hacer un “llamamiento” a la sociedad en su conjunto para dejar de “normalizar” ciertas conductas que pueden derivar -y derivan cada día- en adicciones y problemas de toda índole.
Sin duda, la principal preocupación de Proyecto Hombre hoy en día pasa por la proliferación del consumo de cannabis y alcohol entre menores. “Tenemos un problema social” cuya solución pasa, en primer término, por reconocer la existencia de dicho problema, mantiene Fuentes al tiempo que recuerda que “el 30 por ciento de las familias de Castilla y León no censuran el consumo de alcohol en menores”. Esa situación, subraya, debería hacernos reflexionar.
“Las familias no siempre son culpables, pero sí tienen una enorme responsabilidad en la solución” a los problemas de adicciones de los jóvenes, ya sea a sustancias legales o ilegales. “Hay que encontrar el equilibrio” como sociedad para atajar situaciones problemáticas.