Nadal afirma que el futuro de Garoña no se dilucidará “de manera inmediata”
El ministro de Energía insiste en que primero se escuchará a todas las partes implicadas, con opiniones que “no son coincidentes”
El Gobierno se ha dado un plazo de seis meses, desde febrero, para tomar una decisión sobre la autorización de la apertura
Álvaro Nadal ha recordado que aún no se ha abierto el periodo de audiencia pública para alegar y “hay mucha gente interesada”
El Ministerio de Energía no tomará “de manera inmediata” una decisión sobre la reapertura de la Central Nuclear de Santa María de Garoña. Tras el informe favorable del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), el Gobierno central se dio un plazo de seis meses para decidir si autoriza la renovación de la licencia o se decreta el cierre de la planta burgalesa. Sin embargo, Álvaro Nadal ha asegurado esta mañana que hay “tiempo más que de sobra” para tomar esa decisión, y que ésta nunca se tomará sin haber consultado antes con todos los agentes implicados.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Nadal ha recordado que ni siquiera se ha abierto aún el procedimiento de audiencia pública, que permitirá presentar alegaciones a favor y en contra de la reapertura de Garoña. Una vez se abra, y se cierre, “hay tiempo más que de sobra” para que el Gobierno tome en consideración esas alegaciones y esclarezca el futuro de la nuclear. “Hay mucha gente interesada en alegar, con posturas muy diferentes y hay que darle tiempo”, ha insistido el ministro de Energía.
El ministro considera que “hay tiempo más que de sobra” para tomar una decisión
De este modo, Álvaro Nadal no tiene intención alguna de decidir “de manera inmediata”, y mucho menos sin escuchar todas las opiniones. “Todo el mundo tiene que tener la capacidad de alegar y poner sus argumentos encima la mesa”, ha reiterado, tras recordar que las opiniones sobre el futuro de Garoña “no son coincidentes”. Ni siquiera en el seno de Nuclenor, empresa propietaria participada por Iberdrola y Endesa, puesto que las eléctricas tampoco coinciden en qué hacer con la nuclear y, sobre todo, cuando tomar la decisión definitiva.
Garoña lleva parada desde diciembre de 2012. Sin embargo, Nuclenor presentó en 2014 solicitud para la renovación de la licencia de explotación, con el horizonte puesto en 2031. Ahora que el Consejo de Seguridad Nuclear ha dado el visto bueno a la reapertura, con algunas condiciones, Iberdrola ha manifestado públicamente que prefiere cerrar la central, pues no la considera rentable (habida cuenta de las importantes inversiones a acometer). Por su parte, Endesa quiere esperar a conocer la opinión del Gobierno antes de tomar una decisión.