Los socios del Burgos votarán la conversión en SAD el 11 de mayo
La Junta Directiva del club convocará un asamblea general extraordinaria con el único objetivo de votar por la transformación en Sociedad Anónima Deportiva
El proceso se iniciaría en junio y partiría con un capital social de un millón de euros, fraccionado en 40.000 acciones de 25 euros cada una
El club está negociando con una entidad financiera la firma de un crédito de 400.000 euros para culminar la temporada
El futuro del Burgos CF se decidirá el próximo 11 de mayo. Esta es la fecha elegida por la junta directiva para convocar una asamblea general extraordinaria en la que se votará sí o no a la transformación del club en Sociedad Anónima Deportiva (SAD). Por ahí pasará el futuro de la junta directiva, que es categórica a la hora de asegurar que la única manera de desarrollar un proyecto ambicioso es la conversión en SAD.
En caso afirmativo, el proceso de conversión se iniciaría en junio y se dilataría durante, al menos, dos meses
Este importante paso decidirá las aspiraciones del club y a la vez podría convertirse en un proceso de ratificación de la directiva, ya que la negativa a la SAD significaría también la dimisión de los dirigentes que, en consecuencia con lo prometieron en la campaña electoral, dejarían paso a otras personas. Es por esto que la fecha es clave para el futuro inmediato y más a largo plazo del club.
El proyecto SAD implicaría dar un salto de calidad y de objetivos de cara a la próxima temporada, según ha explicado Miguel Ángel Pascual, director general del club, en un encuentro con los medios de comunicación. Para ello, el planteamiento de la junta directiva es la convocatoria para la conversión en SAD con un capital social de un millón de euros, que se fraccionará en 40.000 acciones, a un precio de 25 euros cada una.
La fracción del capital social pretende animar a muchos burgaleses a la compra de acciones, de modo que el Burgos CF sea un proyecto de ciudad, tal y como ha incidido Pascual.
Capital social
Así las cosas, si el 11 de mayo una mayoría de los 2.992 socios con derecho a voto aprueban la conversión en la asamblea general extraordinaria, se iniciaría un proceso que sacaría a la venta las primeras acciones en el mes de junio. La adquisición de capital social se fraccionaría en tres plazos. El primero de ellos estaría dirigido a los socios, que solo podrán adquirir un máximo de 13 acciones. Este plazo, al igual que los dos siguientes tendrá una duración de 20 días.
Seguidamente, los socios que compraron acciones en el primer paso, podrán comprar cuantas quieran, limitándose a la proporción de las ya adquiridas y, finalmente, si los socios no han cubierto el millón de euros del capital social, entonces cualquiera, sea persona física o jurídica, podrá hacerse con las acciones que queden disponibles hasta el millón de euros. En ningún caso, aunque el club pudiese despertar más interés, se procederá a una ampliación de capital.
Además, los socios que compren una acción se beneficiarán de un 10 por ciento de descuento en el carnet de abonado de la temporada 2017/18 y si lo que tienen es un paquete de cuatro o más acciones, el descuento será de un 25 por ciento.
Sin dinero
Por otro lado, el director general del Burgos CF ha avanzado que la junta directiva se encuentra negociando un crédito de 400.000 euros, que serían necesarios para acabar la temporada. El importante “agujero” se justifica en la optimista previsión de ingresos del presupuesto realizado por la anterior junta directiva, según Pascual, así como otros gastos que ha asumido el club con la contratación de personal del que el club no disponía, más allá de los jugadores firmados en el mercado de invierno.