Diputación ofrece su ayuda para la rehabilitación de la iglesia de Villangómez

César Rico recuerda que está pendiente el nuevo Convenio de Goteras y que “hay fondos” para actuaciones urgentes

Los técnicos del seguro tienen que concretar los daños y, a partir de ahí, se elaborará el proyecto de restauración

El técnico de obras del Arzobispado calcula que costará entre 80.000 y 100.000 y lo primero deberá ser cerrar la cubierta

Diputación ofrece su ayuda para la rehabilitación de la iglesia de Villangómez La espadaña se derrumbó.. BC

La Diputación de Burgos dispondrían de fondos para ayudar a la rehabilitación de la espadaña de la iglesia de San Cosme y San Damián de Villangómez, que ayer se vino abajo a consecuencia del temporal que azota estos días la provincia. En concreto, el presidente de la Institución Provincial, César Rico, ha recordado que se cuenta con la nueva convocatoria de ayudas del Convenio de Goteras y, además, para “actuaciones urgentes y extraordinarias” también “hay fondos” en Diputación.

Rico todavía no se ha puesto en contacto con el alcalde de Villangómez, Juan Carlos Peña, pero lo hará a partir del lunes. El objetivo es conocer con exactitud lo ocurrido en la parroquia y ver cómo puede colaborar la Diputación. Mientras, en Villangómez todavía no saben cuánto costará rehabilitar la espadaña. La lluvia y el viento derribaron minutos antes de las nueve de la mañana el segundo y el tercer cuerpo de la estructura, que cayó sobre la bóveda y la balaustrada, ambas construidas con piedras góticas.

Los servicios religiosos se han traslado a un local privado del municipio

Los desperfectos son importantes, ha reconocido Juan Carlos Peña, si bien aún no están valorados. Ayer se pasaron por el lugar el vicario general del Arzobispado, Fernando García Cadiñanos, y el técnico de obras, Fermín González. Y así se encontraron “una ruina”, ha reconocido González, quien valora que el coste de la restauración estaría entre 80.000 y 100.000 euros. Los técnicos del seguro del Arzobispado tienen todavía que acercarse a valorar los daños y serán con esa información con la que se elabore el correspondiente proyecto de obras.

La cubierta, prioritaria

González ha explicado que lo prioritario es cerrar la cubierta, aunque sea de manera provisional. A continuación tocará limpiar los restos caídos, seleccionando con cuidado las piedras góticas para conseguir una rehabilitación adecuada, que permita recuperar la iglesia parroquial en su esencia. Lo más problemático será encontrar la financiación para cubrir la obra. Parte se hará con el dinero del seguro y la otra parte, con ayuda de las instituciones, comenzando por la Diputación y el Convenio de Goteras, ha reconocido el técnico de obras.

La iglesia parroquial de San Cosme y San Damián estaba completamente restaurada y “muy cuidada”. Los retablos y el coro habían sido rehabilitados y contaba con calefacción. Ahora, los servicios religiosos se han tenido que trasladar a un local privado de Villangómez. Lo ideal habría sido utilizar el centro de jubilados, explica el alcalde, pero se encuentra habilitado como centro de salud, porque el consultorio médico está en obras. Un despropósito. De todos modos, si fuera necesario, se trasladarían los servicios a algún municipio próximo.