La Subida de San Miguel mejora su accesibilidad tras 7 años de negociación

Los propietarios y el Ayuntamiento suscriben el convenio para financiar las obras de sustitución de las escaleras por un ascensor

El proyecto costará 266.000 euros y la ayuda municipal cubrirá el 35%, al ser un espacio privado de uso público

Los vecinos plantearon la intervención y la necesidad de ayuda hace siete años pero no se ha materializado has ahora

La Subida de San Miguel mejora su accesibilidad tras 7 años de negociación El convenio se ha suscrito esta mañana. PCR

El Ayuntamiento de Burgos y la mancomunidad de propietarios de la Plaza Subida de San Miguel han suscrito esta mañana el convenio de colaboración para mejorar la accesibilidad a esta plaza, espacio privado de uso público, ubicada en los entornos de la calle San Francisco. El acuerdo llega siete años después de que los vecinos planteasen la necesidad de contar con la ayuda municipal para financiar unas obras que comenzaron hace un mes, y que está previsto que finalicen para primavera.

La intervención plantea la eliminación de las escaleras de acceso actualmente existentes, y su sustitución por una rampa y un ascensor, que será de uso exclusivo para los vecinos, a menos de momento. Y es que experiencias similares en la ciudad han demostrado que dejar abierto el ascensor al uso público podría generar numerosos inconvenientes para los vecinos, que son los encargados de su mantenimiento. Además, se aprovechará para levantar el pavimento de la plaza e impermeabilizarla.

Se sustituirán las escaleras por un ascensor y una rampa, y se rehabilitará la plaza

En total, el proyecto tiene un presupuesto de 266.000 euros, de los que el 35 por ciento correrá a cargo del Ayuntamiento, unos 93.000 euros. Primero se entregarán 27.900 euros, dentro de un mes, aproximadamente, y el resto de la ayuda se abonará una vez justificada la totalidad de la inversión. El alcalde, Javier Lacalle, ha recordado que el Ayuntamiento ha recogido hasta en 3 ocasiones la partida presupuestaria para sustentar el convenio, sin embargo, los vecinos han tardado en organizarse para acometer la obra.

Los trabajos comenzaron hace un mes y “van a buen ritmo”, de tal modo que se espera que finalicen para primavera. En estos momentos son 48 los propietarios que conforman la mancomunidad, que se ha encargado de gestionar la redacción del proyecto y la contratación de las obras. El modelo de convenio municipal es el mismo que el utilizado en Padre Silverio, las traseras del Carmen o el antiguo patio del colegio Maristas (calle Concepción), donde el Ayuntamiento colaboró con obras que afectaban a espacios privados de uso público.