La economía regional desacelera en el tercer trimestre pero supera previsiones
El informe de contabilidad regional del tercer trimestre refleja un crecimiento de la economía de Castilla y León del 3 por ciento
Se han registrado buenos comportamientos en todos los sectores productivos y se ha mantenido la generación de empleo
El Producto Interior Bruto (PIB) de Castilla y León registró un crecimiento interanual del 3 por ciento en el tercer trimestre de 2016, cuatro décimas menos que en el trimestre anterior, según los datos de contabilidad regional presentados esta mañana por la consejera de Hacienda de la Junta, Pilar del Olmo, que reflejan también una variación intertrimestral que pasa del 0,9 por ciento al 0,3 por ciento en este periodo.
Los servicios y al construcción se han comportado mejor que la industria y el sector primario
Desde la perspectiva de la oferta, durante el tercer trimestre de 2016 se ha producido un mayor crecimiento del Valor Añadido Bruto (VAB) de los servicios y de la construcción y una desaceleración del sector primario y de la industria. Así, el VAB del sector primario de Castilla y León registró en el tercer trimestre de 2016 una variación interanual del 5,4 por ciento (5,5 por ciento en el periodo anterior), con un crecimiento de la producción agrícola y un decremento de la ganadera.
Mientras tanto, el VAB de la industria experimentó un incremento del 1,5 por ciento en el tercer trimestre del año, inferior al observado en el periodo anterior (5,7 por ciento), como consecuencia, fundamentalmente, de una mayor contracción del VAB de las ramas energéticas, que decrecieron el 10,5 por ciento interanual (-2,7 por ciento en el segundo trimestre) debido a la mayor contracción del suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado así como de las ramas extractivas en este periodo.
A esa situación se le suma una desaceleración del subsector de la industria manufacturera, que presentó una variación anual del 3,3 por ciento en este trimestre, inferior a la reflejada en el anterior (7 por ciento), debido fundamentalmente a una menor aportación de las ramas de material de transporte y alimentarias, así como a la contribución negativa de otras ramas como las de industria química y metalurgia y productos metálicos.
Por su parte, el sector de la construcción anotó una moderada aceleración en el tercer trimestre del año, pasando del 1,5 por ciento al 1,7 por ciento, debido a la mayor actividad de la edificación residencial y no residencial y de la obra civil, mientras que el VAB del conjunto del sector servicios reflejó en este tercer trimestre un mayor aumento respecto del anterior periodo (3,4 por ciento y 2,9 por ciento, respectivamente).
Más demanda interna
En el otro lado de la balanza, la contabilidad regional del tercer trimestre refleja un crecimiento de una décima de la demanda interna, alcanzando el nivel de los 3,6 puntos porcentuales. En contraste con esto, la contribución del sector exterior fue negativa, presentando una aportación negativa de 0,6 puntos porcentuales al crecimiento del PIB en el tercer trimestre del año.
Con todo, esta retahíla de datos se transofrmó en un dinamismo moderado del mercado de trabajo. Así, el empleo, medido en puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, refleja un incremento interanual del 4,5 por ciento en este tercer trimestre del año, 1,9 puntos más que en el precedente, con aumentos en todos los sectores productivos excepto en el de la construcción.