24-25. Xavi Díaz frena en seco al Villa de Aranda
El ex cancerbero ribereño para sobre la bocina un lanzamiento de ‘Bicho’ que hubiera supuesto el empate tras un partido en el que el Valladolid fue superior
El Villa de Aranda se vio lastrado por un pésimo bagaje ofensivo en la segunda parte
Al final, Xavi Díaz ejerció de verdugo. El ex cancerbero ribereño se convirtió hoy en indudable protagonista del derbi frente al Recoletas Atlético Valladolid, parando un lanzamiento de ‘Bicho’ sobre la bocina que hubiera supuesto el empate para un Villa de Aranda que a punto estuvo de obtener un premio mayor del que quizá se merecía visto lo visto en el Príncipe de Asturias. Y es que, los hombres de Senovilla pecaron de falta de ideas y mostraron una imagen muy pobre en el segundo tiempo, permitiendo que el Recoletas se llevara el derbi y, de paso, sumara su primera victoria a domicilio.
Ficha Técnica
24 – Villa de Aranda (12+12): Amérigo (p), Bojicic (2), Adrián Fernández (3), Moyano (6, 1p), Moscariello (2), Petter (2), ‘Bicho’ (1) -siete inicial-; Ledo (p), Montserrat (-), Megías (-), Amorim (-), Ortega (3, 1p), Álvaro Torres (-), Nantes (5).
25 – Atlético Valladolid (11+14): Javi Díaz (p), Diego Camino (4), Fernández (6, 2p), Río (3), Serdio (1), Viscovich (2), Víctor Rodríguez (3) -siete inicial-; Nicolás López (1), Turrado (-), De la Rubia (-), Mínguez (-), Serrano (2), Lorasque (2), Miguel Camino (1), Dujshebaev (-).
Parciales: 2-1, 4-5, 6-6, 7-8, 8-10, 12-11 (descanso); 12-13, 13-16, 15-18, 16-20, 19-23, 24-25 (fin del partido).
Árbitros: García Mosquera (Galicia) y Muro San José (Madrid). Excluyeron dos minutos a Bojicic, Megías y Moscariello por el Villa de Aranda y a Serdio y Nicolás López por el Recoletas.
Incidencias: Partido correspondiente a la undécima jornada de la Liga Asobal disputado en el pabellón Príncipe de Asturias ante unos 1.400 espectadores. Alrededor de dos centenares de aficionados se desplazaron desde Valladolid.
Partido muy igualado en los primeros compases, en los que ni uno ni otro consiguieron imponer su ley, gracias, en parte, al buen papel desarrollado por Amérigo y Xavi Díaz entre palos. Ambos guardamentas se erigieron como protagonistas, firmando unas estadísticas que por momentos se mantuvieron en un 50 por ciento de eficacia. Fruto del concurso de ambos, el marcador tardó en arrancar, y cuando lo hizo, lo hizo a favor del Villa de Arnada (2-1).
Sin embargo, poco le duraría al conjunto ribereño la iniciativa, puesto que los hombres de Nacho González ajustaron piezas y dieron pronto la vuelta al marcador (4-5), una situación en la que se desenvolvieron con cierta comodidad. A ello ayudó, sin duda, la presencia sobre el sintético de Diego Camino. El eterno capitán del Villa de Aranda regresaba al Príncipe de Asturias con otra camiseta, pero con la misma calidad y visión de juego que siempre. Una calidad que permitió al Atlético Valladolid dominar en el ataque estático para intentar abrir brecha (8-10) en el marcador.
Esa fue la primera situación crítica del choque, pero el Villa de Aranda supo gestionarla gracias al concurso de Raúl Nantes. Cierto es que el Recoletas estaba defendiendo muy bien la primera línea, pero es muy difícil parar al lateral brasileño cuando está en racha. Gracias a su aportación en los últimos minutos, el conjunto ribereño consiguió irse a vestuarios habiendo dado la vuelta al marcador y con una tímida ventaja (12-11). No obstante, aquello fue un mero espejismo.
Y es que, el Villa de Aranda regresó tras el tiempo de asueto con una enorme caraja en materia ofensiva. Hasta tal punto llegó la situación que los hombres de Senovilla sólo fueron capaces de marcar tres goles en los primeros veinte minutos de la segunda mitad, un bagaje demasiado escueto como para plantear problemas al Recoletas. Eso sí, no todo fue desmérito del conjunto ribereño. También fue destacable el trabajo defensivo que firmaron los hombres de Nacho González, perfectos en la basculación y en la anticipación de las líneas de pase.
Fruto de esa situación, el Recoletas comenzó pronto a marcharse en el marcador hasta alcanzar una cómoda ventaja de 5 goles (15-20) a falta de diez minutos. Fue entonces cuando llegó la reacción. El Villa de Aranda, herido en su orgullo, firmó un parcial de 4-0 para empatar el choque al filo del minuto 29. Parecía imposible, pero los hombres de Senovilla estaban más vivos que nunca. Sin embargo, el Recoletas aprovechó su último ataque, cosa que no hizo el Villa de Aranda. Casi sobre la bocina, ‘Bicho’ recibía en el pivote, se elevaba y probaba con un lanzamiento a bocajarro que se encontró con el cuerpo del ex cancerbero ribereño. No pudo ser.