Gómez plantea ocho propuestas concretas para “mejorar” el presupuesto…
El concejal no adscrito Fernando Gómez, presenta sus aportaciones al borrador del presupuesto municipal incorporando ocho propuestas
Plantea mejoras en bibliotecas, en las riberas del Arlanzón y el Vena, eliminar las partidas de la UNED y Relaciones Laborales y un Plan Director para el Castillo
También pide una partida específica para la conservación del patrimonio
Fernando Gómez repasó sus propuestas. GIT
Fernando Gómez también quiere participar en la negociación para la elaboración del presupuesto municipal. Uno de los hasta hace poco hombres fuertes del Equipo de Gobierno y hoy concejal no adscrito merced a la polémica por el cobro de las dietas de desplazamiento registró ayer sus propuestas particulares en torno al presupuesto, cumpliendo así el plazo planteado semanas atrás por Lacalle. Y lo hizo con el objetivo de negociar su inclusión en un documento que, eso sí, considera ya que cuenta con buenos mimbres gracias al amplio “consenso” con el que ha nacido.
Gómez plantea una partida de 250.000 euros para financiar conservación del patrimonio
A partir de ahí, y asegurando que su voto en el pleno no estará condicionado por la aceptación íntegra de sus propuestas, Gómez ha puesto sobre la mesa hasta ocho planteamientos particulares, circunscritos, según ha explicado esta misma mañana, a ámbitos muy concretos, empezando por la eliminación de parte de las partidas vinculadas a la financiación de la Escuela de Relaciones Laborales y de la UNED.
Según ha reiterado, la incorporación en el presupuesto de ambas partidas, que suponen un gasto conjunto de alrededor de 600.000 euros, implica la asunción de competencias impropias, por lo que deben ser eliminadas del presupuesto, al menos la parte proporcional al curso 2017-2018 para no causar perjuicios a los alumnos del curso actual, ya en marcha y con inversión comprometida.
Cultura y medio ambiente
Al margen de ese ahorro sobre las cuentas municipales, Gómez plantea la incorporación de nuevas partidas de inversión en el presupuesto, encaminadas, según ha explicado, a impulsar la cultura, proyectos medioambientales y en una mejora de las políticas de conservación del patrimonio. En este sentido, el concejal no adscrito propone modificar el destino de los 50.000 euros inicialmente previstos para la adquisición de obras de Ignacio del Río y crear un premio de pintura joven que homenajee al genial artista.
Asimismo, Gómez también plantea la puesta en marcha de un plan de bibliotecas que establezca prioridades y marque la línea a seguir en los próximos años, atendiendo a las necesidades actuales. A este respecto, sobre la mesa ya hay varias ideas, como una reorganización de la biblioteca del Teatro Principal, un plan de pequeñas mejoras en las infraestructuras actuales, la redacción de un proyecto de ampliación de la Gonzalo de Berceo o el proyecto para una nueva biblioteca en la zona sur.
En esta misma línea, el concejal no adscrito ha propuesto la redacción de un Plan Director para el Castillo en el que se aglutinen todas las actuaciones en materia patrimonial, turística, medioambiental, arqueológica y deportiva que se puedan llegar a plantear. El objetivo: coordinar la puesta en valor que de un tiempo a esta parte se está llevando a cabo en uno de los iconos de la ciudad, cuyo pasado ha comenzado a investigarse a través de los proyectos arqueológicos planteados en San Román y la judería.
En el ámbito medioambiental, además, Gómez plantea dos actuaciones concretas, basadas en la redacción de sendos proyectos de mejora de la ribera del Río Vena en su zona más oriental y de la margen derecha del río Arlanzón entre Capiscol y el antiguo molino del cauce molinar.
Patrimonio
Sin embargo, la propuesta de mayor calado, al menos por su cuantía económica inmediata, sería la creación de una partida presupuestaria específica reservada para actuaciones de conservación y puesta en valor del patrimonio cultural de la ciudad. Y es que elementos singulares como la fuente de Santa María, el arco de San Martín, la espadaña del monasterio de San Juan, las ruinas del convento de San Francisco o los lienzos de la muralla medieval exigen atención constante para evitar su deterioro. Y para eso hace falta dinero, según Gómez, “unos 250.000 euros” en 2017, cuyo destino estaría coordinado con el Consejo para la Custodia del Patrimonio Mundial de la UNESCO.