El Parque de Cuerdas del Castillo cierra su primera temporada con 8.433 visitas

Entre abril y octubre visitaron el Parque de Cuerdas del Castillo un total de 8.433 personas, lo que supone un resultado satisfactorio para la Fundación CISA

Ya se ha comenzado a pensar en posibles estrategias de cara al 2017

La primera temporada de actividad del Parque de Cuerdas del Castillo se ha cerrado con unos resultados satisfactorios. Así al menos lo aseguran los responsables de la Fundación CISA de Aspanias, entidad encargada de la gestión de la instalación, que afirman que los resultados han estado a la altura de las expectativas. En total, en estos siete primeros meses de vida, por el complejo han pasado 8.433 personas, fundamentalmente niños de entre 9 y 12 años de edad, el público que parece haber acogido con mayor interés la apertura del Parque de Cuerdas.

Durante el mes de junio visitaron las instalaciones 2.408 personas, fundamentalmente niños de entre 9 y 12 años

Como era de esperar, los mejores resultados se han registrado durante el mes de junio, coincidiendo con el final del curso escolar y el inicio de las vacaciones de verano. Esa situación, acompañada del desarrollo de diferentes jornadas especiales, permitió que a lo largo del mes pasaran por el Parque de Cuerdas 2.408 personas. También en julio, cuando se desarrollaron actividades vinculadas a los Campamentos Urbanos, se registró una buena entrada, con 1.651 visitas en total. En agosto fueron 1.324 y en mayo 1.377, mientras que los meses de abril (457), septiembre (763) y octubre (453) han sido más flojos. Nada fuera de lo esperado, sobre todo teniendo en cuenta que la instalación ha abierto las tardes, los fines de semana y las mañanas en función de la demanda.

Con todo, una vez cerrada la primera temporada, toca hacer balance. Y los responsables de la Fundación CISA afirman estar “contentos”. En este sentido, María Ortega, responsable del programa, insiste en que se han cumplido los dos grandes objetivos planteados al inicio de la concesión. No en vano, añade, se ha generado empleo para personas con capacidades diversas y se ha conseguido potenciar la oferta de ocio de la ciudad.

Programa ambicioso

Durante toda la campaña, explica, la instalación ha estado gestionada por ocho usuarios de la Fundación y otros dos trabajadores cualificados. Entre todos ellos se han encargado de atender al público, mantener la seguridad de los circuitos y gestionar los diferentes aspectos del día a día, lo que no es baladí. Y es que, el trabajo de cara al público es “algo diferente” a lo que venían realizando hasta ahora los usuarios de la Fundación, acostumbrados a trabajos con un perfil quizá más mecánico. Además, insiste, “el retorno de los clientes ha sido muy bueno” y “no ha habido ni un solo accidente”, por lo que la experiencia ha sido muy positiva.

Ahora, toca empezar a plantear la próxima temporada. En principio, la instalación permanecerá cerrada durante los meses de invierno, aunque Ortega no descarta que se pueda abrir alguna jornada puntual “bajo demanda”, aunque será, en todo caso, algo excepcional. Así pues, siguiendo los criterios marcados en el contrato de concesión firmado con el Ayuntamiento por cinco años, la actividad regresará al Parque de Cuerdas en abril de 2017. Será entonces cuando se pueda disfrutar de las posibles novedades que se vayan planteando durante estos meses. E ideas no faltan.

Ideas

En este sentido, Ortega asegura que aún es muy pronto como para decidir nada, pero reconoce que en los últimos meses han surgido varias ideas que puede resultar “interesantes”. De momento, lo que parece claro es que la estrategia de cara al próximo año pasará por intentar incrementar las visitas de público adolescente. No en vano, explica Ortega, “el 90 por ciento de todas las visitas son chavales de entre 9 y 12 años y sería interesante incrementar esa horquilla para atraer también a un público algo más mayor”.

Asimismo, la intención de la Fundación pasa por desarrollar diferentes actividades encaminadas a generar y aprovechar las sinergias que ofrece el propio Castillo y su entorno natural. Para ello, se barajan opciones como el desarrollo de rutas de senderismo o la entrada conjunta al Centro de Interpretación de Aves del Castillo. Todo ello planteado para hacer de esa zona un punto de interés para burgaleses y visitantes.