Imagina atribuye a la “presión social” el fin del fracking en Burgos
La formación recuerda la fuerte oposición de ecologistas, organizaciones agrarias, ayuntamientos y ciudadanos
Las movilizaciones han dado sus frutos, propiciando la renuncia de BNK España al permiso ‘Urraca’, una vez caducado
La “presión social” de grupos ecologistas, sindicatos agrarios, ayuntamientos y ciudadanos sensibilizados con el medio ambiente han propiciado la renuncia de BNK España al proyecto de investigación de hidrocarburos en Villarcayo, Medina de Pomar y Merindad de Cuesta Urría, a juicio de Imagina Burgos. La compañía canadiense confirmaba ayer a BurgosConecta que, una vez caducado el permiso de ‘Urraca’ y sin contar con la declaración de impacto ambiental necesaria para realizar los pozos de exploración, se retiraba del proyecto burgalés.
Imagina ha recordado la gran movilización social contra la fractura hidráulica en Brugos, con numerosas manifestaciones, la última de ellas, este mes de julio en masa. Todas las movilizaciones “han sido realmente efectivas”, opina la formación en una nota de prensa, tanto por el número de personas que se han congregado “como por la unidad de acción” que han supuesto. De hecho, decenas de ayuntamientos y hasta la propia Diputación de Burgos “se han mostrado contrarias a la técnica de extracción”.
Las organizaciones contrarias al fracking han ido dando “pasos sólidos”, indican desde Imagina. Así, en el mes de marzo, la Comisión de Industria del Congreso de los Diputados aprobaba una proposición no de ley por la que se exigía al Gobierno en funciones la prohibición del uso en España de la fractura hidráulica como técnica para la extracción de hidrocarburos. Fueron los “partidos políticos” impulsados por la “fuerza de la gente” quienes dieron el paso, ha insistido la formación.