Medina de Pomar renueva ‘La Ruta de Carlos V’ en su décimo séptima edición
El Emperador será recibido en la Plaza Somovilla y el Desfile Imperial finalizará en la Plaza del Alcázar
Un campamento militar nos acercará al ejército del siglo XVI, recreándose incluso una emboscada nocturna
El Ayuntamiento continúa aspirando a conseguir el título de Fiesta de Interés Turístico Regional
Medina de Pomar vuelve este fin de semana al siglo XVI. BC
En Medina de Pomar cuentan las horas para recibir al Emperador Carlos V. La localidad se llenará de miembros de la Corte Castellana, militares, músicos y comediantes renacentistas en ‘La Ruta de Carlos V. El último viaje del Emperador’, que celebra este fin de semana su décimo séptima edición. Y lo hace con algunas novedades. Medina de Pomar no solo estará más engalanada que nunca, sino que también recibirá al Emperador en la Plaza Somovilla, y el Desfile Imperial finalizará en la Plaza del Alcázar.
‘La Ruta de Carlos V’ dará comienzo el sábado en Agüera de Montija, donde se dará la bienvenida a Carlos V a las 13:00, y el regidor le hará entrega de las llaves del municipio. De este modo se recuerda que la entrada del Emperador a Burgos fue a través de Agüera, localidad a la que llegó el 8 de octubre de 1556. Un día más tarde, se trasladaría con su séquito a Medina de Pomar, donde pernoctaría durante dos noches. Mientras, en Medina tendrá lugar la inauguración del Mercado Renacentista, compuesto por más de 40 puestos de artesanos y mercaderes.
La programación se inicia con al recepción al Emperador en Agüera de Montija
La música será una de las grandes protagonistas del programa festivo, con rondas musicales trovadorescas, acompañadas de pandillas de comediantes, y pasacalles amenizados por diferentes tipos de artistas. Y por la tarde se podrá disfrutar de una actuación de Voces Nostrae. El concejal de Cultura, Carlos Pozo, ha destacado el campamento militar de la Compañía de Cristóbal de Mondragón, que recreará el día a día de los soldados del siglo XVI, organizando además juegos de época y acciones de instrucción. Todo ello en la Plaza del Alcázar.
Desfiles, espectáculos de fuego y emboscadas
Lo más llamativo de la jornada del sábado es sin duda alguna la recepción del pregonero real, a las 19:00, con el tradicional desfile de la Corte Castellana, con dulzaineros, danzas renacentistas y una exhibición de ejercicios militares del siglo XVI con armas de fuego y picas. Ya por la noche tendrá lugar un espectáculo de fuego y una ‘Encamisada’, ataque sorpresa al campamento militar. Ya el domingo se ofrecerá el Desfile Imperial, que se iniciará a las 12:30 en la Plaza Somovilla, donde se recibirá al Emperador, y finalizará en la Plaza del Alcázar.
Se contará con la participación de 700 figurantes, entre burgaleses, cántabros, vascos, extremeños… Y es que las localidades que forman parte de la Ruta de Carlos V se vuelcan unas con otras en sus respectivas iniciativas culturales y turísticas, ha explicado el concejal. El programa festivo se completa con visitas guiadas al Monasterio de Santa Clara, al Alcázar y al Centro Histórico, y actividades para los más pequeños de la mano de la Guardia Irreal, que amenaza con llevárselos a la mazmorras si no cumplen la ley.
Los peques podrán disfrutar de talleres y actividades con la Guardia Irreal
Una programación variada, en la que se cuidan mucho los detalles, y que bien merece ser Fiesta de Interés Turístico Regional. Carlos Pozo ha recordado que el pasado año se reconoció como Itinerario Cultural Europea a las Rutas del Emperador Carlos V, un proyecto cultural y turístico conformado por más de 40 municipios de Europa y el norte de África, y del que forma parte la ruta medinesa. De ahí que considere que es el momento de que la Junta les conceda el título de Fiesta de Interés Turístico y, por ese motivo, Pozo se lo solicitará en una reunión en noviembre.
Recordando la historia
‘La Ruta Carlos V. El último viaje del Emperador’ recrea el viaje realizado por el monarca desde Flandes hasta el Monasterio de Yuste. El Emperador abdicó en 1555, dejando sus reinos en manos de su hermano Fernando y de su hijo Felipe, e inició camino a España. Recorrió numerosos territorios europeos y entró en nuestro país en 1556 por Cantabria, en concreto por Laredo. País Casco, Castilla y León y Extremadura son los territorios que recorrió hasta llegar al Monasterio de Yuste, lugar de retiro en el que falleció en 1558.