Sáez Aguado afirma que Eficanza ha dejado de facturar 12,4M€ por el HUBU
El consejero ha recordado que la concesionaria ha asumido “riesgos” en el proyecto del Hospital Universitario de Burgos
Las variaciones en estancias o menús han hecho mermar los ingresos y, además, asume alteraciones de precios de servicios
Sáez Aguado ha asegurado que las relaciones con Eficanza no han sido “pacíficas” y niega “irregularidades” en el proceso
El consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Antonio María Sáez Aguado, ha asegurado que el proyecto del Hospital Universitario de Burgos (HUBU) no ha sido precisamente una panacea para Eficanza. La empresa concesionaria asumió una serie de “riesgos”, que ya están empezando a tener consecuencias. Y es que Eficanza dejó de facturar 12,4 millones de euros entre la apertura del HUBU y noviembre de 2015 en concepto de tasa interna de retorno por variación sobre su actividad.
Eficanza debe asumir reparaciones, reposiciones y actualización de equipos
Es decir, los ingresos se han visto mermados porque dependen del número de estancias, los menús o los servicios asociados, ha explicado el consejero durante su comparecencia en la Comisión de Investigación del HUBU. Una variación cuyas consecuencias no tiene que asumir la Junta, gracias al modelo de concesión, dado que se limita a pagar un canon anual, ha insistido. Sin embargo, estos no son los únicos “riesgos” que ha asumido Eficanza en el proyecto burgalés.
Las alteraciones en el gasto energético, ya sea por variación de precios o del propio gasto, también corren a cargo de la empresa concesionaria, así como reparaciones, reposiciones y actualización de equipos, ha insistido el consejero. Además, Sáez Aguado ha asegurado que los costes de los servicios externalizados en el HUBU están por debajo de lo que se viene gastando la Consejería de Sanidad en el resto de hospitales públicos, ya que en el burgalés la factura alcanza los 25,8 millones, frente a los 31 millones de León o los 34 de Salamanca.
Sin irregularidades
En la línea de las comparecencias de Pilar del Olmo o de Juan Vicente Herrera, el consejero ha negado que se hayan producido “irregularidades” en el proceso de contratación de la obra del HUBU, la ejecución de la misma y, ahora, la gestión del centro hospitalario. Los modificados, que han incrementado el coste final del proyecto y del equipamiento, se han hecho siguiendo “los procedimientos establecidos”, contando con informes jurídicos favorables y con el control de la Intervención regional.
Asegura que el proyecto es “complejo” y ha exigido modificaciones para adaptarse a nuevas necesidades
Además, las decisiones tomadas con respecto al proyecto del HUBU han respondido siempre al “interés público”, no al interés de la empresa concesionaria, y los modificados han venido dados por nuevas necesidades. Sáez Aguado rechaza que se acuse a la Junta de falta de planificación o improvisación, asegurando que el proyecto del hospital es tan “complejo” que genera este tipo de situaciones. Igualmente, el consejero ha recordado que las relaciones con Eficanza no han sido “pacíficas”.
Y es que en hasta cuatro ocasiones la disparidad de criterios ha acabado ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, quien ha desestimado las pretensiones de la concesionaria en cuestiones relacionadas con precios. Antonio María Sáez Aguado ha esgrimido también el argumento que viene manejando el Partido Popular desde hace año, insistiendo en que sino se hubiese escogido al fórmula de la concesión, Burgos ahora mismo no dispondría de un centro hospitalario nuevo, o se habría construido a costa de la inversión regional en otros equipamientos.