… Y FAE y Cámara apelan a la “comprensión mutua” y la “flexibilidad” de posiciones

Las entidades hacen un llamamiento tanto a partidos políticos como a entidades acreedoras y miembros del Consorcio del Desvío

Se ofrecen para mediar en la búsqueda de soluciones y recuerdan que está en juego el futuro de la ciudad y de las próximas generaciones de burgaleses

Una vez más, la Cámara de Comercio e Industria y la Confederación de Asociaciones Empresariales de Burgos (FAE) salen a la palestra para aportar su granito de arena al complejo proceso de renegociación de la deuda del Consorcio del Desvío Ferroviario. Ambas organizaciones apelan a la responsabilidad de los representantes políticos, pidiéndoles que “piensen más en los burgaleses” que en sus intereses políticos, a fin de tomar decisiones “con el máximo acierto”, ya que de ellas depende el futuro de la ciudad.

Y es que PSOE, Imagina y Ciudadanos ya han mostrado su rechazo a la propuesta de reestructuración de la deuda, por lo que el convenio a suscribir entre Ayuntamiento y Consorcio, y que materializaría el acuerdo alcanzado con las entidades financieras, no se aprobará en el pleno del próximo viernes. Una situación complicada ante la que FAE y Cámara hacen un llamamiento, que afecta no solo a los grupos municipales, sino también a las entidades acreedoras y al resto de miembros del Consorcio, a saber, las fundaciones CajaCírculo y Caja de Burgos.

En una nota de prensa, FAE y Cámara les piden que “hagan el mayor esfuerzo de comprensión mutua” y aporten “el mayor grado de flexibilidad” en la negociación, a fin de poder cerrar un acuerdo. Ambas entidades han mantenido en los últimos días reuniones tanto con el Consorcio del Desvío como con grupos políticos. El objetivo era conocer la situación de la deuda, el desarrollo de las negociaciones y el punto de vista de cada uno de los partidos con representación en el Ayuntamiento.

Amenaza

Y de la información recibida se desprende que la dimensión de la deuda “puede llegar a amenazar la existencia” del propio Consorcio, recuerdan. Una disolución que alteraría “gravemente” el equilibrio de las arcas municipales en un horizonte cercano, ya que el Ayuntamiento debería asumir en solitario el pago de la deuda de 167 millones de euros. Así las cosas, partidos, entidades consorciadas y acreedores coinciden en que la situación a la que se enfrenta la ciudad es comprometida, si bien discrepan en las soluciones ha plantear, reconocen las organizaciones.

Por ese motivo, FAE y Cámara ponen a disposición de todas las partes implicadas su capacidad de diálogo y mediación, a fin de buscar una solución a este “grave problema”, siempre y cuando se considera que su mediación “puede ser útil para alcanzar el necesario consenso”. Además, ambas entidades recuerdan que, sis bien son asuntos diferentes, el modo en el que se resuelva la reestructuración de la deuda del Consorcio del Desvío será “determinante” para el futuro del Consorcio de Villalonquéjar.