Junta y CHD estudian cómo mejorar el operativo frente a inundaciones

El consejero Suárez-Quiñones y el presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero se han reunido para analizar los sistemas de información

Se busca mejorar los tiempos de respuesta ante crecidas y los plazos y mecanismos para avisar a los municipios afectados por riadas

Las inundaciones del Arlanza en febrero pusieron de manifiesto fallos en las cadenas de información, según los alcaldes

La Agencia de Protección Civil de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente y la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) estudian cómo maximizar la eficacia del operativo diseñado para los episodios de inundaciones en la región. En una reunión, el consejero Juan Carlos Suárez-Quiñones y el presidente de la CHD, Juan Ignacio Diego, han analizado los sistemas de intercambio de información entre ambos organismos, estudiando la posibilidad de ampliar el contenido de ese intercambio.

El objetivo sería mejorar los plazos en los que se da aviso a los municipios afectados por la crecida de los ríos de la cuenca del Duero, a fin de minimizar las consecuencias de un desbordamiento. Desde la Confederación Hidrográfica del Duero se han mostrado especialmente interesados en la tecnología que emplea el Centro Coordinador de Emergencias para prever posibles zonas que puedan verse afectadas por el crecimiento de los caudales de los ríos, así como los bienes que podrían correr algún peligro.

En febrero se activaron los protocolos pero la riada pilló de sorpresa a los municipios

Esas previsiones se basan en los sistemas de información disponibles, así como en los incidentes registrados en el 112 en cada episodio de inundaciones. Todos los datos que se manejan en el Centro Coordinador se han puesto a disposición de la CHD para que pueda ajustar los umbrales en los que se basa a la hora de delimitar sus zonas de riesgo. Igualmente, el encuentro ha contado con una visita al Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH), en el que se han intercambiado impresiones sobre cómo mejorar los tiempos de respuesta e información.

Un planteamiento que responde a las demandas que, al menos desde Burgos, se han realizado por parte de municipios afectados por inundaciones. Tras el desbordamiento del Arlanza, el pasado mes de febrero, los alcaldes burgaleses se quejaron de que no supieron de la magnitud de las avenidas hasta que las tuvieron encima, de ahí que Salas de los Infantes acabase anegada, lo mismo que la zona baja de Lerma, por ejemplo. La CHD aseguró entonces que activó todos los protocolos, pero la cadena de información falló en algún punto, y ha tocado revisarla.