La Junta autoriza el “trampeo” del avispón asiático ante la “plaga” de Las Merindades
Los apicultores podrán legalizar las trampas instaladas, que se completan con las de la Junta y las de algunos ayuntamientos
En Valle de Mena se han cazado 300 ejemplares en un par de meses y Yolanda Martínez ha capturado alrededor de 200
Los apicultores reclaman poder utilizar el método troyano y están a la espera de una reunión en Valladolid con los técnicos
Tras dos años de reivindicaciones, la Asociación de Apicultores Burgaleses ha conseguido que la Junta de Castilla y León autorice la instalación de trampas para dar caza al avispón asiático, que ya se ha convertido en una “plaga” en la comarca de Las Merindades. Eso sí, la colocación de las trampas deberá ser autorizada previamente por Medio Ambiente, y solo se podrán instalar en zonas en las que ya se haya detectado presencia de estos animales, muy dañinos para las abejas y la producción de miel.
Los apicultores burgaleses mantuvieron el pasado 20 de mayo una fructífera reunión con responsables del Servicio Territorial de Medio Ambiente y Agricultura. De la misma salieron, por fin, con la autorización para el “trampeo”, que legalizará las trampas que muchos apicultores han ido poniendo por su cuenta, recuerda la presidenta del colectivo, Yolanda Martínez, y que que se unirán a las propias de la Junta y a otras colocadas, por ejemplo, por el Ayuntamiento de Valle de Mena.
Y es que en apenas dos meses el Consistorio menés ha cazado 300 ejemplares de avispón asiático y Martínez, alrededor de 200, a los que habría que sumar los avispones que hayan cazado otros apicultores y el resultado de las trampas de la Junta. Una verdadera “plaga”, insiste Martínez, que en su caso ha pillado ejemplares de estos bichos en todas y cada una de sus 14 colmenas, distribuidas a lo largo y ancho de Las Merindades, en Villarcayo, Valle de Mena o Merindad de Sotoscueva e, incluso, en la zona de Las Marchorras.
Lo mismo les ha ocurrido en Valle de Mena, comenta el concejal de Medio Ambiente, David Sáinz-Aja. La veintena de trampas colocadas en el municipio se han llenado, así que el trabajo de los bomberos voluntarios ha sido intenso. Se han encontrado avispones asiáticos por todas las zonas, en especial, en las limítrofes con el País Vasco, de donde deriva la plaga. El concejal recuerda que sus trampas están instaladas en el casco urbano, pero el Servicio Territorial de Medio Ambiente también cuenta con cuatro de ellas por la zona.
Los ejemplares capturados están siendo clasificados y se remitirán a la Junta de Castilla y León para que tenga constancia de su existencia. En el caso de los apicultores, la gestión se está realizando a través de las unidades de veterinarios, explica Yolanda Martínez. Además, se están retirando también los nidos que se localizan, para evitar que el avispón asiático se siga reproduciendo. Y es que el verano va a ser “movidito“, reconoce esta apicultora, puesto que se van a destruir muchas colmenas y la cosecha de miel va a caer en picado.
Troyano
Por ese motivo, los apicultores burgaleses insisten en reclamar permisos para aplicar el método troyano. Consiste en rociar con un insecticida especial lomo y abdomen de avispones asiáticos, a los que previamente se les han quitado las patas traseras, y dejarlos en libertad para que acudan a sus nidos y acaben con el resto de sus compañeros. Se requeriría de una media de 20 0 25 avispones tratados y con uno o dos sesiones se erradicaría la plaga, recuerda Martínez. Además, no solo es un método eficaz, sino que no daña al medio ambiente.
Pero, de momento, en el Servicio Territorial les han emplazado a una reunión con Medio Ambiente, en Valladolid, para que sea directamente la Consejería la que autorice el troyano. Y corre prisa, puesto que el método debe aplicarse entre julio y agosto. Yolanda Martínez insiste en que el daño que causan los avispones asiáticos en la naturaleza es enorme, y si no se les pone freno acabarán por extenderse por toda la provincia. Ya el pasado año la Junta los detectó en La Demanda.