La UBU ha facilitado este curso diez alojamientos compartidos
Esta iniciativa, que cumple una década, ha permitido realizar 76 convivencias con experiencias muy positivas para ambas partes
La persona mayor recibe compañía y atención en labores que no puede realizar, mientras facilita el alojamiento gratis a un alumno universitario
Diez parejas, formadas por personas mayores y estudiantes de la Universidad de Burgos (UBU), han compartido su vida durante el curso 2015-16 dentro del programa alojamientos compartidos. Este programa comenzó su andadura hace diez años, fruto de un convenio de colaboración entre la Universidad de Burgos, la Gerencia de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de Burgos.
Cuando prácticamente ha terminado el curso, la UBU abre el plazo para que todas las personas mayores que quieran participar en esta experiencia y sentirse acompañadas, acogiendo a un alumno universitario puedan hacerlo. Según señala la técnico del Servicio, Lourdes Bustamante, la persona mayor y el estudiante inician una convivencia basada en el diálogo y el respeto mutuo.
El programa ha facilitado 76 convivencias en estos diez años desde su puesta en marcha
Con esta iniciativa la persona mayor ofrece al universitario un alojamiento gratuito en su domicilio y a cambio recibe su ayuda en la realización de gestiones y otros apoyos, además de poder contar con su compañía. Por su parte, el estudiante deberá colaborar con la persona mayor en las tareas que entre ambos decidan y contribuir en los gastos que genere su estancia.
Previo al inicio de la convivencia, ambas partes, conjuntamente con la UBU, concretan las condiciones que consideran necesarias y establecen las obligaciones para que la experiencia resulte grata y beneficiosa. La voluntad de las dos personas se recoge en un acuerdo regulador de la convivencia suscrito por los dos. En todo caso existe un periodo de prueba de un mes.
El seguimiento de cada convivencia es continuo durante todo el curso, por medio de visitas a domicilio, llamadas telefónicas, entrevistas con las dos personas en conjunto y por separado. La persona responsable del programa, está pendiente de que todo vaya bien, además los participantes pueden recurrir ella para cualquier problema que pueda surgir.
El balance del Programa, según Bustamante, es muy positivo, hasta la fecha la Universidad ha formalizado su relación un total de 76 convivencias y las personas que participan se han mostrado muy contentas de haberlo hecho. Todas ellas relatan que la convivencia ha sido muy beneficiosa para las dos partes.
Aproximadamente, 35 estudiantes de la Universidad de Burgos muestran su interés cada año para participar en este programa, pero el número de personas mayores que solicitan información es menor, unas 10 personas por año.