El Colegio de Aparejadores crean un centro de mediación civil y mercantil

Una treintena de aparejadores y arquitectos técnicos colegiados ya se han formado como mediadores e iniciarán el centro

Se ofrecerán para ayudar a resolver conflictos evitando acudir a los tribunales, fórmula preferida entre los ciudadanos

La mediación facilita el cumplimiento voluntario de los acuerdos y, en este caso, es una salida laboral más para el colectivo

El Colegio de Aparejadores crean un centro de mediación civil y mercantil González, Concepción y Almansa antes de la presentación. PCR

El Colegio de Aparejadores, Arquitectos Técnicos e Ingenieros de Edificación de Burgos acaba de poner en marcha el primer centro de mediación civil y mercantil de Castilla y León, que estará gestionado por aparejadores y arquitectos técnicos burgaleses. Se trata de una iniciativa con la que se busca un doble objetivo. Por una parte, ofrecer una alternativa laboral a profesiones muy tocadas por la crisis. Por otra, ayudar en la resolución de conflictos entre partes, evitando llevar el caso ante los tribunales.

Inicialmente, serán una treintena de aparejadores y arquitectos técnicos del colegio, formados a  finales de 2015 en mediación, los que integren el centro, ha explicado el presidente de los Aparejadores, Jesús Manuel González. Su ámbito de actuación será nacional y podrán mediar en conflictos mercantiles y civiles, una propuesta única en Castilla y León, pero ya desarrollada en otras regiones, como Madrid, que se sumará también a los centros de mediación de otros colectivos profesionales, como el de los arquitectos.

Concepción reconoce que con la “escasez” de plantilla judicial y medios impide “satisfacer” las necesidades del sistema

El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL), José Luis Concepción, ha participado de la presentación pública del centro de mediación, asegurando que “es bueno” que se arbitren fórmulas alternativas a la vía judicial, como las que ofrecen arbitraje y mediación. Es más, dada la “escasez” de plantilla judicial y los “insuficientes” medios humanos y materiales de la justicia española, en algunas ocasiones el sistema impide “satisfacer” las necesidades de los ciudadanos”, así que viene bien una fórmula alternativa.

Cultura de mediación

Por su parte, el mediador y abogado Arturo Almansa considera que la mediación es también “un nuevo paradigma en la construcción de la sociedad”, una nueva cultura que “empodera” a las partes en conflicto y reconoce su protagonismo y su capacidad de encontrar soluciones. Y es que seis de cada diez ciudadanos prefieren resolver sus conflictos a través de un acuerdo, “aunque suponga una pérdida”, antes que acudir a los tribunales, ha asegurado. En un pleito, los afectados “pierden el control” del caso, al dejarlo en manos de abogados y del juez para su resolución.

Por es motivo, la fórmula de la mediación también facilita el cumplimiento voluntario de los acuerdos alcanzados. Asimismo, permite un abaratamiento de los costes, una rapidez en la resolución de los conflictos e, incluso, liberar de carga de trabajo a los órganos judiciales. Eso sí, Almansa ha insistido en que para “desatascar” la justicia española se requiere de más medios humanos y materiales, porque la sobrecarga viene de esa escasez denunciada por José Luis Concepción.