Autoridades y vecinos acordarán un protocolo ante los okupas de El Crucero
Representantes de los distintos grupos municipales y vecinos han contrastado sus propuestas para poner freno al movimiento okupa del barrio
La Policía Local y Nacional se reunirán con los servicios jurídicos y sociales del Ayuntamiento antes de marcar las pautas de actuación que deben seguir los vecinos
Una de las viviendas de la calle del Duero que permanece ocupada desde hace más de un año. IAC
Los vecinos del barrio de El Crucero han encontrado el respaldo necesario en los diferentes grupos políticos con representación en el Ayuntamiento para poner freno a un movimiento okupa que está haciendo de la convivencia de algunos de ellos un verdadero infierno. Tras varios meses denunciando esta situación, los vecinos han mantenido una reunión este pasado lunes con uno o varios representantes de las cuatro fuerzas políticas que forman el Consistorio.
Las fuerzas de seguridad tienen una especial sensibilidad hacia esta zona
Fruto de esa cita, políticos y vecinos han expuesto la situación de algunas zonas de El Crucero y han mostrado predisposición a actuar de inmediato para resolver los problemas de ocupación de más de una veintena de viviendas. De esta forma, la primera de las decisiones supone el refuerzo de la presencia policial en la zona, así como una vía de contacto directo entre políticos, policías y vecinos, de forma que las partes implicadas conozcan las novedades que puedan darse en el barrio.
Además, se realizará un “inventario”de las viviendas y los puntos calientes para los okupas, para que sean tenidos en cuenta en las rondas de vigilancia que lleven a cabo los agentes. Por último, los vecinos han demandado la intervención de los Servicios Semat para recoger a los animales, especialmente perros, que, según los vecinos, merodean por el barrio sin dueño aparente.
Próximos pasos
Puestos sobre la mesa los retos que presenta actualmente el barrio, la reunión se cerró con un nuevo paso concretado, que no es otro que tanto Policía Local y Nacional, como miembros de Servicios Sociales y jurídicos del Ayuntamiento, se reúnan este miércoles para fijar un protocolo de actuación que permita resolver este problema.
Una vez establecidas las pautas de actuación, representantes municipales y vecinales se volverán a reunir -antes de que termine esta semana- para que los primeros den a conocer el campo de actuación que tiene el Ayuntamiento en este conflicto social.