Valle de Tobalina concede la licencia para el almacén de residuos de Garoña

La decisión la tomaba la Junta de Gobierno Local la semana pasada, sin comunicárselo a la oposición

El proyecto supondrá una inversión de 12 millones de euros y permitirá contar con 32 contenedores de residuos

Equo califica la decisión de “irresponsable” y considera “inadmisible” que se haya ignorado a la Diputación de Álava

El Ayuntamiento de Valle de Tobalina ha concedido la licencia de obras para la construcción del almacén temporal de residuos nucleares promovido por la Empresa Nacional de Residuos Radioactivos (ENRESA) y Nuclenor junto a la Central Nuclear de Santa María de Garoña. La decisión la tomaba la semana pasada la Junta de Gobierno Local, controlada por el Partido Popular, aunque no ha trascendido hasta hoy jueves, cuando Equo ha emitido una nota de prensa calificando la decisión de “irresponsable”.

La licencia fue aprobada la semana pasada por la Junta de Gobierno local del Valle de Tobalina

Los concejales Jesús Ángel López de Mendoza (PSOE) y José Luis Conde (Vivir en Tobalina) han confirmado la concesión del permiso, y si bien han reconocido que al Ayuntamiento “no le ha quedado más remedio”, han criticado que no se haya contado con la oposición. Es más, PSOE y Vivir en Tobalina se ha enterado a toro pasado, y se trata de un asunto “muy sensible”. Es una decisión que “no se puede tomar a la ligera”, ha insistido López de Mendoza, y mucho menos sin hablar con la oposición.

La licencia permitirá iniciar las obras para construir un almacén temporal de residuos nucleares, con una inversión de 12 millones de euros, lo que dará pie a que la la planta burgalesa acoja 32 contenedores de desechos radioactivos. Eso sí, inicialmente solo contará con 5 de ellos. El socialista Jesús Ángel López de Mendoza ha recordado que la construcción del almacén tiene un coste de 5,3 millones, mientras que cada uno de los contenedores requerirá de un desembolso de 1,3 millones extraordinarios.

Además, el socialista ha anunciado que exigirá, en el próximo pleno municipal, que se revoque el permiso, porque considera que es una decisión que “no se puede tomar a la ligera”. Igualmente, está dispuesto a convocar una asamblea con vecinos de los municipios de la zona de afección para darles a conocer lo sucedido, y si piden que se exija la dimisión de la alcaldesa, Raquel González, así lo hará. Y es que López de Mendoza ha insistido en que, por mucho que el proyecto cumpla con las normas urbanísticas, no se trata de una obra cualquiera.

“Irresponsable”

Por su parte, el candidato al Congreso por Equo, Juantxo López de Uralde, ha calificado la decisión de “irresponsable”, al mismo tiempo que ha reclamado el cierre de la central nuclear. Además, el candidato considera “inadmisible” que se haya ignorado a la Diputación Foral de Álava, impidiendo que participe en la fase de alegaciones, tras mostrar su rechazo al proyecto. La institución ya protestó cuando el Ministerio de Medio Ambiente emitió informe favorable de impacto ambiental, requisito previo para conceder la licencia.

López de Uralde ha recordado que el almacén temporal convierte a Garoña en un “cementerio nuclear” y perpetúa el “riesgo radioactivo” para la zona de influencia. Es más, López de Uralde ha cuestionado su utilidad, y sobre todo su servicio de futuro, si no se construye el almacén centralizado de Villar de Cañas (Cuenca). Equo ha afirmado que seguirá exigiendo el cierre de Santa María de Garoña, sobre todo después de que el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) haya reiterado que emitirá el informe sobre la solicitud de reapertura en el mes de noviembre.