El Supremo condena a un policía por endosarle una multa suya a una vecina de Miranda

El Tribunal Supremo acaba de condenar a un policía nacional que en 2011 le endosó una multa de tráfico suya a una vecina de Miranda de Ebro

El agente fue sorprendido circulando por La Castellana en Madrid a 90 km/h y la multa le llegó a una mujer que en ese momento estaba en Burgos

La Sala Segunda del Tribunal Supremo acaba de condenar a un policía nacional, captado por un radar cuando conducía su vehículo a 90 kilómetros por hora por la Castellana de Madrid, por identificar falsamente como conductora del coche a una vecina de Miranda de Ebro. La sentencia le condena por delito de intento de estafa a 3 meses de prisión.

El alto tribunal anula la condena por el delito de descubrimiento y revelación de secretos, que también apreció en primera instancia la Audiencia de Madrid, al no considerar probado que los datos de dicha mujer los obtuviese el acusado de las bases de datos que tenía a su disposición como agente de Policía. Por ello, la pena se rebaja de 2 años y medio de cárcel, a 3 meses.

Los hechos ocurrieron al filo de las 4:30 horas del 23 de marzo de 2011, cuando el agente, al volante de su turismo, fue detectado en el Paseo de la Castellana, de Madrid, por un radar estático circulando a velocidad excesiva (91 kilómetros por hora, cuando el límite, al ser casco urbano, era de 50 km/h). La infracción, de carácter grave, llevaba aparejada 500 euros de multa y la retirada de 6 puntos del carnet.

Al ser requerido para identificar al conductor, hizo constar en el impreso oficial, por sí mismo u otra persona a instancia suya, el nombre y dirección de una vecina de Miranda de Ebro, que en marzo de 2012 recibió una notificación de Tráfico detallando la pérdida de puntos, lo que destapó el engaño. La mujer, en el momento de la captación por el radar de la infracción de velocidad, se encontraba en Burgos.