83-72. Amarga despedida para una temporada inesperada
Los burgaleses caen con la cabeza alta ante un inspirado Peñas Huesca
El quinto puesto final es un regalo a una afición que ha arropado a un proyecto que surgió en el tiempo de descuento
La directiva ya piensa en analizar los aciertos y errores de la temporada para comenzar a planifica, esta vez con tiempo, la próxima camapaña
Los jugadores se felicitan después de una reñida semifinal. C.Pascual
No pudo ser. El San Pablo Inmobiliaria no fue capaz de ganar uno de los dos partidos que le hubiese permitido recuperar el factor cancha y disputar el quinto y definitivo partido en El Plantío. Los burgaleses lo intentaron con más corazón que acierto, pero no fueron capaces de doblegar a un Peñas Huesca en estado de gracia. La confianza de los oscenses fue la clave en el desarrollo del cuarto partido de la serie en el que los hombres del técnico burgalés, Diego Epifanio ‘Epi’, salieron con una alta concentración, a pesar la tensión que se les suponía en un encuentro sin margen de error.
Ficha técnica
83 – Peñas Huesca: Aegir Steinarsson (8), Kris Davis (8), Guillem Colom (7), Jorge Lafuente (5), Marcos Portalez (0), Daniel Bordignon (15), Joan Pardina (6), Goran Huskic (10), Christian Díaz (10), Gabrielius Maldunas (14).
72 – San Pablo Inmobiliaria: Roger Vilanova (0), Anton Maresch (8), Javi Vega (4), Justas Sinica (12), Augustas Peciukevicius (11), Filip Toncinic (15), Edu Martínez (9), Roger Fornas (13).
Cuartos: 21-20; 14-16; 17-15; 31-21;
Árbitros: Morales Ruiz y Zafran Guerra.
Incidencias: Cuarto partido correspondiente a la segunda serie del playoff de ascenso a liga ACB disputado en el Palacio de los Deportes de Huesca ante unos 2.700 espectadores.
De más a menos, los azules pasaron de disfrutar de nueve puntos de ventaja (24-33), a sufrir para aguantar el ritmo marcado por los Goran Hiskic, Christian Díez, Gabrielius Maldunas y compañía, que castigaban sus errores. A pesar de las rachas y el esfuerzo de unos y otros por romper el partido, se llegó a un último cuarto que dejaba un final incierto (52-51). Pero el cara o cruz en el que se convirtió epílogo del partido sonrió a los oscenses, mucho más acertados desde el perímetro. El San Pablo lo intentó hasta que Christian Díaz anotó ocho puntos consecutivos en apenas dos minutos (79-71). Ahí se acabó el partido, la eliminatoria y la temporada de un equipo que ha permitido a los burgaleses seguir disfrutando de baloncesto profesional en la ciudad, tras la renuncia del CB Tizona.
Igualdad máxima en un inicio de partido que parecía una repetición del que se había vivido el pasado viernes. Mismo escenario, mismos quintetos y misma fluidez de un Peñas Huesca que anotaba con mayor facilidad que un San Pablo algo tenso por su estrecho margen de error. Repitiendo el guión del tercer partido, el Peñas Huesca estaba acertado y explotaba bien la debilidad de la zona. La igualdad era la tónica general de un cuarto que terminó con un marcador de 21 a 20.
El segundo cuarto comenzó con un gran San Pablo Inmobiliaria. Los azules estaban fuertes atrás y muy acertados en el tiro. Fruto de ese momento, protagonizado por Roger Fornas, Quim Costa tuvo que pedir tiempo para frenar el parcial de 3-13 encajado (24-33). Entonces, la reacción de Huesca igualó de nuevo el partido en unos últimos cuatro minutos de cuarto en los que los burgaleses perdieron el acierto. Así se llegó al descanso con solo un punto a favor de los azules (35-36).
Toma y daca en el comienzo de la segunda mitad. Peñas anotó dos triples consecutivos que les dieron algo de oxígeno (41-38). La alternativa del San Pablo fue automática, parcial de 0-5 y recuperación del liderazgo en el marcador (41-43). La fluidez disfrutada durante los primeros compases del tercer cuarto se esfumó y el partido vivió un atasco generalizado en ambas canastas que ni unos ni otros fueron capaces de aprovechar. Cuando se retomó el acierto, San Pablo volvió a ponerse con una pequeña renta a favor (41-47) que podía haber servido para que hubiesen roto el partido. Pero la alternancia en el acierto llevó a Peñas Huesca a castigar la pintura del conjunto burgalés y cerrando el cuarto un punto por delante (52-51).
Sin acierto
Un último cuarto de infarto cortó la respiración de la afición burgalesa desplazada hasta el Palacio Municipal de Deportes de Huesca. Los locales añadieron dramatismo a la complicada situación de los burgaleses (57-53). Pero el San Pablo mantuvo la cabeza fría y se volvió a acercar lo máximo posible al Peñas (57-56). Pero esto no significaba nada. Las rachas iban y venían como cambios de viento. Entonces, los locales volvían a tomar un pequeño margen (62-57) al que respondieron los hombres de ‘Epi’ con un parcial de 0-4 y vuelta a empezar (62-61). Las rachas se rompieron con la anotación de ocho puntos consecutivos de un desaparecido, hasta el momento, Christian Díaz y el jarro de agua fría sobre los burgaleses les cercenó la confianza para darle la vuelta a un partido que cada vez se ponía más cuesta arriba (79-71). La puntilla estaba dada y por mucho que se intentase hasta el final, Peñas Huesca fue justo ganador de una serie realmente igualada en la que las diferencias, a pesar de los marcadores de los dos últimos partidos, fueron mínimas (83-72).
Con este partido se pone punto y final a la primera temporada del Club Baloncesto Miraflores en la LEB Oro. Este mismo lunes, directiva, cuerpo técnico y jugadores se reunirán para programar las próximas jornadas en la ciudad y cerrar una campaña para el recuerdo.