Y la gravedad se diluye en las dimensiones, un proyecto escolar que aspira al CSIC
Héctor Serna y Andrea Bujedo, alumnos del Colegio Saldaña, investigan cómo se diluye la gravedad en el multiverso
El proyecto nació de una curiosidad surgida al estudiar el trabajo de Einstein tras el hallazgo de ondas gravitatorias
Los chavales han demostrado que la barrera dimensional distorsiona la realidad e influye en la percepción de la gravedad
La iniciativa se presentará al Certamen Jóvenes Investigadores del CSIC tras ganar la Feria de Investigación de Castilla y León
Todo empezó con el descubrimiento de ondas gravitacionales. En el mes de febrero, los científicos del Observatorio de Ondas Gravitacionales con Interferómetro de Láser (LIGO, en sus siglas en inglés) detectaron por primera vez estas ondas, demostrando que Albert Einstein tenía razón, una vez más. Y es que el científico predijo, como parte de su Teoría de la Relatividad, la existencia de este tipo de ondas (que las producen todos los cuerpos en movimiento), siendo esta la última de sus predicciones que aún no se había podido demostrar por observación directa.
El hallazgo despertó la curiosidad de Héctor Serna y Andrea Bujedo, dos alumnos de 4º de la ESO del Colegio Saldaña de Burgos, que se pusieron a investigar sobre las teorías de la Relatividad y de Cuerdas, y de ahí surgió un interesante proyecto científico que les ha hecho merecedores del primer premio de la Feria de Ciencia y Tecnología de Castilla y León, celebrada el pasado fin de semana en la Universidad de Burgos. Un proyecto que lleva por título ‘Cómo se diluye la gravedad en el multiverso’.
Utilizaron varios imanes y crearon un programa informático que simulaba la gravedad
Juan Serna, su profesor de Matemáticas, recuerda que entre las muchas dudas que les surgieron al abordar el trabajo de Einstein estaba comprender cómo es posible que un imán pueda atraer unos tornillos, por ejemplo, compitiendo con la fuerza de la gravedad de la tierra, que es mucho más potente. Investigando, los chicos encontraron algunas teorías que plantean que la gravedad se diluye en las dimensiones de la tierra y, por ese motivo, se nota en toda su magnitud, explica Serna.
Así que Héctor y Andrea plantearon un proyecto para analizar cómo influye la gravedad en un universo de bidimensional. Utilizaron varios imanes, como “foco de atracción exterior”, y un programa informático “muy sencillo” que simulaba la gravedad, ha recordado el profesor. Todo muy “artesano”. Tras varios experimentos, los alumnos pudieron comprobar que la barrera dimensional distorsiona la realidad, llegando incluso a hacerla desaparecer, y eso también funciona así en el caso de la gravedad.
Es decir, la gravedad se diluye en las dimensiones de un universo y, por ese motivo, no siempre es detectable por los seres que lo habitan, o no en toda su magnitud. Juan Serna recuerda que el proyecto de Héctor y Andrea es relevante en su justo contexto, dado que los estudiantes de la ESO de 15 y 16 años, a estas alturas de su vida, están “con suerte” resolviendo ecuaciones, no planteándose cómo se diluye la gravedad en el multiverso. Por ese motivo, Serna pretende presentar la investigación al Certamen Jóvenes Investigadores del CSIC.
Aula Invertida
El proyecto es fruto del modelo pedagógico de ‘Aula Invertida’, que se implementa desde 2002
El profesor reconoce que va a ser difícil entrar, porque allí el nivel es “altísimo”. Si se valora la capacidad de trabajo de estos dos alumnos, habría posibilidades. Si, por el contrario, se tiene más en cuenta el resultado, pues menos. De todos modos, a Juan Serna lo que verdad le importa es que este proyecto es fruto de un proyecto pedagógico que el Colegio Saldaña lleva desarrollando desde 2002. Se refiere al modelo educativo ‘Aula Invertida’, que se basa en convertir el aula en un espacio de trabajo activo y aprendizaje colectivo.
A través de las nuevas tecnologías se derivan actividades clásicas de las aulas, como las lecciones y los deberes, para que se realicen en el ámbito doméstico. Y la clase se queda para profundizar en los contenidos, analizarlos y reflexionar. Por ejemplo, en el caso de Serna, sus lecciones están grabadas, así que los alumnos pueden verlas dónde, cómo y cuándo quieran. También cuentan con ejercicios online, que se autocorrigen, e incluso exámenes virtuales. Y en clase se apuesta por iniciativas más profundas como esta investigación.
También han trabajado en un programa de radio, en un cómico o en una web, en los que vuelcan sus conocimientos en matemáticas. De este modo, el aprendizaje es mucho más divertido y cala en el alumno, Se trata de aprender y sacar las máximas potencialidades de cada uno de los alumnos. El proyecto de ‘Aula Invertida’ ya ganó un premio de la Junta de Castilla y León en el curso 2005-2006 y, este año, se presentará a los Premios Nacionales de Educación.