Vilviestre del Pinar: madera, piedra y turismo en un lapso político

El municipio pinariego destaca por su industria maderera y de la piedra, resistentes aunque vivieron tiempos mejores

El turismo y el aprovechamiento micológico son los nuevos recursos económicos, combinados con la ganadería extensiva

Vilviestre del Pinar: madera, piedra y turismo en un lapso político Vista panorámica de Vilviestre del Pinar. BC

“No hay mejor gobierno que el de los vecinos”, aseguraba Borja Suárez, en el transcurso del pleno que aprobaba la creación del ente gestor de Vilviestre del Pinar. El municipio estará dirigido políticamente, durante los tres próximos años, por siete diputados provinciales. “Nos viene impuesto por la ley”, insistía el portavoz del Equipo de Gobierno, y se trata de un parche a un “fracaso político” que no gusta a nadie, muchos menos a esos diputados que tendrán que aplicarse ahora para conocer la realidad de este pueblo de 600 habitantes.

Vamos a ayudarles. Vilviestre del Pinar se ubica en la Comarca de Pinares, rodeado de una extensa masa arbórea de pino negro, principalmente, que constituye una de sus principales fuentes de actividad económica. De hecho, en el municipio están radicadas cuatro serrerías familiares, que se dedican a la aserrado de madera para su transformación, recuerda Feliciado González, gerente del grupo de acción local Asopiva. También se cuenta con una cooperativa de trabajo asociado, de origen familiar, que en este caso fabrica palés.

Si hablamos de madera, la ‘suerte de montes’ será una de las cuestiones más importantes a las que tendrán que enfrentarse los diputados venidos a concejales. Son los vecinos los que gestionan el aprovechamiento maderero de su monte, gracias a un derecho adquirido hace más de ocho siglos, por el que se benefician de los ingresos que consigue el Ayuntamiento a través de la venta de la madera. Unos beneficios que tributan a Hacienda desde 2009, una situación que se quiere cambiar en numerosos municipios del entorno.

Otro de los pilares de la economía de Vilviestre es la extracción de la piedra, de la que se encarga ahora una compañía mexicana, tras la debacle que Areniscas de Pinares. La explotación de la cantera ha sido fuente continua de discrepancias, sobre todo en los que se refiere al pago de compensaciones por parte de las empresas explotadoras. De hecho, González recuerda que la Agrupación de Electores Carmona, que ha gobernado el municipio durante los dos últimos mandatos, nació precisamente de estos conflictos.

Alternativas

Pero no solo de madera y piedra vive Vilviestre. La ganadería extensiva de vacuno continúa viva, aunque no con tanta energía como en su vecino Quintanar de la Sierra. El aprovechamiento micológico de níscalos y botetus también ha enraizado en el municipio, sin que se haya dejado a un lado las oportunidades del turismo. Vilviestre se encuentra en una ubicación privilegiada, con una gran riqueza medioambiental, muy cerca del Parque Natural de las Lagunas Glaciares de Neila o de la Casa de la Madera de Comunero de Revenga.

Salas de los Infantes, y sus yacimientos de icnitas de dinosaurio, tampoco están lejos. Y justo al lado se encuentra Quintanar de la Sierra y la necrópolis antropomórfica de época altomedieval. Por ciento, con Quintanar comparte el origen de la Real Cabaña de Carreteros, creada por los Reyes Católicos cuando se diseñaron las rutas para el transporte de mercancías desde el interior del país a las zonas costeras. Desde Burgos se llevaba madera, lana merina y pez naval a puertos como Laredo, Bilbao y Pasajes, en uno de esos típicos viajes serranos del siglo XVI que está recreando este año la Real Cabaña de Carreteros.