Tres nuevos estudios del CENIEH vinculan neandertales europeos y asiáticos

El CENIEH colabora en tres nuevos estudios sobre fósiles del género Homo localizados en Europa, Africa y China que permiten establecer nexos de unión

Todos ellos presentan rasgos arcaicos y derivados en su morfología

Tres nuevos estudios del CENIEH vinculan neandertales europeos y asiáticos José María Bermúdez de Castro y Emiliano Bruner presentaron las conclusiones de los estudios. GIT

Las poblaciones neandertales de Europa y Asia podrían tener más vínculos de los que se creía hasta ahora. Así lo han asegurado hoy el director del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH), José María Bermúdez de Castro, y el científico Emiliano Bruner, que han presentado las conclusiones de tres importantes estudios en los que ha colaborado el CENIEH y cuya publicación ha coincidido en el tiempo. Se trata de tres estudios elaborados en torno a tres fósiles hallados en diferentes periodos en los yacimientos de Buia (Eritrea), Moba (China) y la Gran Dolina de Atapuerca.

Los tres estudios han sido publicados casi a la vez en las revistas científicas más prestigiosas

Los resultados obtenidos en todos ellos indican que los tres fósiles, datados en periodos que van de entre 1 millón de años y 130.000 años, presentan ciertas características comunes. Y es que, todos ellos tienen rasgos arcaicos y rasgos derivados, lo que no hace sino reformar algunas de las hipótesis con las que trabajan hoy en día los paleoantropólogos y que apuntan a la existencia de una rama evolutiva euroasiática de la que se derivan las poblaciones de ambos continentes.

En este sentido, cabe destacar las conclusiones obtenidas a través del análisis paleoneurológico del cráneo localizado en Moba. La datación temporal sitúa ese fósil en un periodo de entre 130.000 y 300.000 años de antigüedad y permite enmarcarlo dentro de la rama de los neandertales e incluso de los Homo Sapines Arcaicos. Sin embargo, lo más curioso de dicho cráneo es que presenta unos rasgos “increíblemente parecidos” a los fósiles encontrados años atrás en los yacimientos italianos de Saccopastore. Dicha coincidencia permite fortalecer la hipótesis sobre los nexos de unión entre las poblaciones neandertales asiáticas y europeas.

Variabilidad

Por su parte, el segundo de los estudios se ha centrado en el análisis paleoneurológico de un cráneo “bastante completo” localizado en el yacimiento africano de Buia (Eritrea) y datado en un millón de años de antigüedad. En este caso, se ha estudiado la cavidad craneal y su relación con el sistema anatómico cerebral que ha permitido comprobar que las poblaciones de Homo Erectus de la zona presentan una “variabilidad” muy superior a la planteada inicialmente. 

Finalmente, el tercero de los estudios ha versado sobre el fósil de un parietal localizado años atrás en la Gran Dolina y asociado “supuestamente” a un individuo perteneciente a la especie de Homo Antecessor. En este caso concreto, se ha procedido a realizar un análisis anatómico a través de microtomografías que ha permitido demostrar que también presenta rasgos arcaicos y derivados en su morfología.