CSI-F rechaza los “cupos” en el acceso a FP
La nueva regulación de acceso reservar un 60% de las plazas para estudiantes procedentes de ciclos de grado medio
Otro 30% quedaría para los que llegan desde Bachillerato y solo un 10% podrían acceder desde el entorno laboral
El sindicato asegura que no puede “tolerarse” estas restricciones, que no se ajustan a la demanda real de los estudios
CSI-F muestra su malestar con la Consejería de Educación por las “restricciones” en proceso de acceso a la Formación Profesional (FP) incluidas en la regulación recién publicada en el Boletín Oficial de Castilla y León. En concreto, la central sindical critica que se hayan establecido cupos de matrícula “que no atienden la demanda real y que dejan fuera a muchos de los alumnos” que quieren cursar los diferentes ciclos.
Y es que la Junta reservará el 60 por ciento de las plazas para aquellos que hayan cursado ciclos de grado medio, el 30 por ciento para los que hayan hecho bachillerato, dejando el 10 por ciento restante para los que accedan directamente mediante prueba de acceso.
“Llevamos demasiado tiempo escuchando, a nuestros responsables educativos, grandilocuentes manifestaciones sobre la necesidad de potenciar la FP, manifestaciones que se contraponen a sus actuaciones reales”, ha manifestado Isabel Madruga, presidenta del Sector de Enseñanza de CSI-F en Castilla y León.
Para CSI-F no puede tolerarse que, de entrada, se impida a un alto porcentaje de alumnos que han cursado un ciclo medio (al menos a un 40 por ciento) la opción de acceder al correspondiente ciclo superior. Tampoco se entiende que haya “cupos” para quienes acceden desde bachillerato y, mucho menos para quienes desean mejorar sus aptitudes desde la vida profesional, que ven limitadas sus posibilidades a un 10 por ciento de las plazas.
“Entendemos que la Consejería ha de aproximar lo más posible la oferta a la demanda real, posibilitando así que nuestra sociedad progrese y nuestros alumnos mejoren su capacitación” ha insistido Isabel Madruga, quien ha asegurado que Castilla y León no puede permitir que sus futuros trabajadores tengan una menor cualificación por falta de políticas educativas que faciliten su acceso a la formación.