El consejero reconoce que “con toda seguridad” la UBU no tendrá Medicina
Fernando Rey recuerda que el colectivo médico lo “desaconseja” y los estudios requerirían de un “desembolso desproporcionado”
Burgos debe explotar sus potencialidades en agroalimentación, tecnología de los alimentos, patrimonio o relaciones industriales
La integración de Relaciones Laborales en la UBU tendrá que retrasarse hasta el curso 2017-2018 porque “no da tiempo” a hacerlo para septiembre
El consejero de Educación, Fernando Rey, ha reconocido esta tarde que “con toda seguridad” la Universidad de Burgos no contará con una Facultad de Medicina. El nuevo mapa de titulaciones en el que trabaja la Junta de Castilla y León, que estará elaborado antes del verano, no recogerá esta reclamación histórica de la institución académica, porque el propio colectivo profesional “desaconseja” la implantación de nuevos estudios de Medicina y, además, estos exigirían un “desembolso desproporcionado” para las arcas regionales.
“La clave no es más universidad necesariamente sino mejor universidad”
Sin embargo, Rey ha asegurado que sí se potenciará la colaboración entre el Hospital Universitario de Burgos (HUBU) y la Facultad de Medicina de Valladolid, para no desaprovechar las instalaciones sanitarias burgalesas. El consejero ha insistido en que la “clave” para contar con una universidad importante, de peso en el sistema académico, no es siempre y necesariamente disponer de más titulaciones. “La clave es saber cómo hacer que la universidad sea mejor”.
Cómo potenciar los grupos de investigación, cómo convertirla en un referente nacional e internacional, cómo hacerla más “competitiva” y “atractiva”, ha insistido el consejero. Y Burgos tiene muchas potencialidades a explotar en el ámbito de la agroalimentación, la tecnología de los alimentos, el patrimonio, las colaboraciones con el tejido industrial… Son todas estas cuestiones las que se tendrán en cuenta en la elaboración del mapa de titulaciones, que tampoco incluirá “supresión” de títulos, porque el propio descenso demográfico va regulando la oferta.
Relaciones Laborales
El acuerdo para el mapa de titulaciones definirá cuáles son los grados y másteres que solicitarán las universidades hasta 2020, y Educación potenciará cuestiones como la internacionalización y la educación a distancia, virtual o semipresencial. El objetivo último es contar con una universidad “sostenible” y “atractiva”. Un universidad que, en el caso de la UBU, seguirá contando con el grado que se imparte en la Escuela de Relaciones Laborales, que se volverá a ofertar como en años anteriores en el curso 2016-2017.
Rey confía en alcanzar un acuerdo con Ayuntamiento y Diputación para la integración
Si bien es cierto que Ayuntamiento y Diputación han manifestado su intención de abandonar el Patronato ya en el próximo curso académico, Fernando Rey ha reconocido que la integración formal de la Escuela en la UBU (ahora es un centro adscrito) se tendrá que retrasar hasta el curso 2017-2018. Se hará de manera progresiva, dado que los alumnos que ya han comenzado los estudios tienen derecho a finalizarlos en la Escuela, ha recordado el consejero, así que la integración se iniciará con los estudiantes de Primero y se cerrará cuatro años después.
Sin embargo, Rey ha explicado que “no dará tiempo” a comenzar a impartir ese primer curso este próximo septiembre, entre otras cuestiones porque el cambio en la dirección rectoral está retrasando el proceso. Aún así, el consejero está convencido de que se conseguirá alcanzar un acuerdo con Ayuntamiento y Diputación para planificar ordenadamente esa integración y la salida de ambas administraciones del Patronato, bajo el que se lleva gestionando la Escuela durante 25 años.
