2-0. El Mirandés pierde contacto con el play off
El Mirandés no consigue acabar con la maldición de Montilivi y suma su segunda derrota consecutiva, alejándose de los puestos de play off
Los de Machín se adelantaron al comienzo de la segunda parte, y cuando mejor estaba jugando el Mirandés, sentenciaron el choque
Segunda derrota consecutiva. El Mirandés volvió a estrellarse hoy en Montilivi y perdió contacto con el play off de ascenso tras un partido dominado en líneas generales por el Girona, que se mostró más incisivo, más eficaz y mucho más solvente. Después de dominar en la primera parte, los hombres de Pablo Machín encontraron el premio del gol nada más arrancar la segunda mitad y acabaron matando el partido en el 70, cuando más lo estaba buscando el Mirandés, que sólo ha sido capaz de sumar dos de los últimos doce puntos en juego.
Ficha Técnica
2 -Girona: Becerra; Aday, Kiko Olivas, Alcalá, Lejeune, Álamo (Clerc, min.63); Pons, Granell; Borja García (Amagat, min.80), Cristian Herrera; y Lekic (Jairo, min.73).
0 -Mirandés: Raúl; Moreno, Álex Ortiz, Kijera; Eguaras, Rúper, Ion Vélez (Abdón Prats, min.65), Provencio; Sangalli, Aridane (Corral, min.46) y Álex García (Alain, min.53)
Goles: 1-0, min.47: Kiko Olivas; 2-0, min.70: Cristian Herrera.
Árbitro: Areces Franco (Comité Asturiano). Mostró tarjeta amarilla a los jugadores locales Javi Álamo y Granell y a los visitantes Aridane y Kijera.
Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo octava jornada de la Liga Adelante disputado en el estadio de Montilivi ante 3.787 espectadores.
Tras unos primeros compases sin dueño, el Girona se hizo pronto con el control del partido, imponiendo el ritmo, abriendo el campo y sacando petróleo de su banda izquierda, en la que Aday, partiendo desde la posición de carrilero, ganó casi todas sus batallas. Esa suerte de autopista supuso el mejor argumento ofensivo de los hombres de Machín, que una vez asentados en el terreno de juego comenzaron enseguida a tantear a Raúl, muy seguro durante todo el choque.
No había transcurrido ni un solo minuto del partido cuando el cancerbero vizcaíno tuvo que sacar un buen disparo cruzado de Lekic. No sería esa la última vez que frenara al delantero serbio. Ni tampoco fue al único que paró, puesto que apenas cinco minutos después, el Girona tuvo una triple ocasión en botas de Borja García y Cristian Herrera que acabó muriendo en la orilla, como también lo hizo un cabezazo de Lekic en el 9 que se marchó desviado.
Era el Girona el que proponía ante un Mirandés totalmente superado por las bandas y sin ideas en la línea de creación. Demasiados balones largos sin un destino bien definido. Sólo Ion Vélez, con un disparo desviado desde la frontal, y Eguaras, con un potente lanzamiento lejano, consiguieron inquietar a la parroquia local, que veía como los sucesivos centros de Álex García y Sangalli morían sin encontrar rematador.
En ese escenario, el Girona se fue creciendo poco a poco hasta acabar dominando en todas las líneas y provocando constantes situaciones de superioridad que, eso sí, se quedaron sin premio. Y es que, ya fuera por la solidez defensiva, ya fuera por la seguridad de Raúl, lo cierto es que los hombres de Machín no acertaron a abrir el marcador. Y eso que opciones tuvieron de sobra, como un remate de Cristian Herrera que se paseó por la línea de gol u otro disparo a bocajarro de Lekic que Raúl envió a saque de esquina en los minutos finales, en los que el Girona acabó protagonizando un auténtico asedio.
Visto lo visto, la mejor noticia para el Mirandés fue que el árbitro mostrase el camino a vestuarios. Sin embargo, la situación no mejoró tras el descanso, sino todo lo contrario. Nada más regresar al terreno de juego, el Girona botaba un saque de esquina al segundo palo que acababa en un centro chut de Cristian que Kiko Olivas aprovechó para poner el 1-0 en el marcador.
Reacción y sentencia
Lejos de venirse abajo, el Mirandés asumió el golpe como si fuera un estímulo y dio un paso al frente. Provencio, que adelantó su posición en la segunda mitad, a punto estuvo de poner la igualada en el 49 con un disparo muy ajustado al palo que Becerra envió a córner. Apenas cinco minutos después, el propio centrocampista firmaba la mejor de los rojillos con un remate en plancha a centro de Sangalli que volvió a encontrarse con las manos de Becerra, cuyas intervenciones hicieron que el Girona mantuviera la ventaja. Y eso fue fundamental. No en vano, del posible empate se pasó en el 70 al 2-0. Cristian Herrera culminaba un gran contragolpe aprovechando una indecisión en el segundo palo para volver a batir por alto a Raúl.
A partir de ahí, el partido se convirtió en un constante quiero y no puedo del Mirandés, que a pesar de los cambios introducidos, se mostró incapaz de batir a Becerra. De hecho, el Girona pudo incrementar su ventaja en los compases finales con una volea de Jairo que sacó de manera espectacular Raúl. El próximo fin de semana, el Mirandés regresará a Anduva para medirse al Elche e intentar por todos los medios recuperar su mejor versión para volver a mirar hacia arriba en el último tercio de la competición.