Hontoria despide a la pequeña Alicia mientras su madre continúa en Cruces
Vecinos de la comarca de Pinares han arropado a la familia del bebé, encabezada por su padre y su abuelo materno
El alcalde de Hontoria, Francisco Javier Mateo, y su homólogo de Vitoria, Gorka Urtaran, han estado presentes
Gabriela sigue ingresada en el Hospital de Cruces mientras continúa la investigación sobre este trágico suceso
Urtaran y Mateo encabezaron la representación institucional. Ricardo Ordóñez
En presencia de amigos, vecinos y autoridades burgalesas y vascas, la familia de Gabriela Oliveira Peñaranda ha enterrado a la pequeña Alicia en el cementerio de Hontoria del Pinar. El bebé de 17 meses fallecía el pasado martes de una hemorragia cerebral después de haber sido arrojado por la ventana de un piso en Vitoria. Mientras, su madre se recupera en el Hospital de Cruces (Baracaldo) de las graves lesiones sufridas durante la agresión protagonizada, presuntamente, por D.M.G, quien permanece en prisión, y al que se podría acusar de un doble delito de asesinato, uno consumado y otro en grado de tentativa.
El alcalde del municipio burgalés, Francisco Javier Mateo, y su homólogo de Vitoria, Gorka Urtaran, han acompañado de manera institucional a la familia de Alicia, con su padre y su abuelo a la cabeza, que ha estado arropada por muchos vecinos, no sólo de Hontoria del Pinar, sino también de otras localidades de la comarca de Pinares. Y es que Gabriela era muy conocida en la zona, a pesar de residir con su madre y su hermana en la capital burgalesa. Su padre, el abuelo de Alicia, Pedro Luis Peñaranda, reside en Hontoria y fue concejal en la anterior corporación municipal, mientras que el padre de la pequeña vive en San Leonardo de Yagüe.
Investigación abierta
La pena y la rabia han sido los sentimientos predominantes en el entierro, en el que los presentes han condenado este nuevo caso de violencia de género. La investigación continúa abierta para determinar qué ocurrió exactamente en la madrugada del pasado lunes, cuando D.M.G lanzó por la ventana al bebé. El joven de 30 años había recogido a Gabriela, con la que acabada de iniciar una relación sentimental, y su hija en Hontoria la tarde del domingo y, en lugar de trasladarlas a Burgos (como pensaba la familia), se las llevó a su domicilio de Vitoria.
Si bien es cierto que la autopsia ha descartado la agresión sexual con penetración, continúan las sospechas de un posible caso de abusos por tocamientos, que habría generado el enfrentamiento entre Gabriela y su agresor. El detenido así lo habría confesado, según fuentes policiales, aunque habrá que esperar a la declaración de la madre para conocer las causas de la agresión que acababa con la vida de Alicia y dejaba gravemente herida a Gabriela.
