El monasterio de San Juan abre al público con su nueva cubierta

Tras concluir las obras de instalación de la nueva cubierta, hoy han sido abiertas al público las ruinas del monasterio de San Juan

Lacalle asegura que Burgos cuenta con “un nuevo espacio” para el desarrollo de actividades en pleno centro de la ciudad

Habrá visitas guiadas a partir de mediados del mes de febrero

El monasterio de San Juan abre al público con su nueva cubierta El recinto estará abierto todos los días hasta mediados de febrero. GIT

Burgos cuenta con un nuevo espacio en el centro de la ciudad para el desarrollo de actividades multitudinarias. Bueno, en realidad ya contaba con él, pero sus condiciones no eran quizá las más apropiadas. Hoy, después de varios meses de trabajo, ha sido inaugurada formalmente la obra de reforma a la que se ha sometido el monasterio de San Juan, cuyas ruinas ofrecen ahora una protección al visitante que durante varios siglos no ha existido. Una enorme cubierta de acero, cristal y madera permitirá desde hoy utilizar el histórico recinto para el desarrollo de actividades sin depender totalmente de la climatología.

Se trataba de una actuación “largamente demandada por los burgaleses”, según Lacalle

Según ha explicado el alcalde de la ciudad, Javier Lacalle, durante la inauguración de la cubierta, se trata de una instalación “largamente demandada por los burgaleses”. No en vano, ha añadido, se lleva hablando de la posibilidad de colocar una cubierta sobre las ruinas del monasterio de San Juan “desde la década de los años 80”. Ahora, tras muchas ideas descartadas y un sinfín de actuaciones previas, la ciudad “cuenta con un nuevo espacio de 1.300 metros cuadrados” que se espera llenar de actividad “entre la primavera y el otoño. En invierno, al margen de algún acto puntual, parece descartado el uso del recinto, por cuanto que la cubierta tiene espacios abiertos y, a pesar de evitar que el agua o la nieve penetren en las ruinas de la iglesia, no protege del frío. 

La intervención, que ha supuesto una inversión de algo más de 1,4 millones de euros, no sólo contempla la instalación de la nueva cubierta, sino que va más allá. Así, FCC, empresa adjudicataria de los trabajos, ha aprovechado para realizar otras actuaciones complementarias, centradas fundamentalmente en la mejora de la accesibilidad del recinto. También se ha adaptado el espacio a los requerimientos de la normativa anti-incendios y se ha aprovechado para limpiar y consolidar las partes de los muros más deterioradas por el paso del tiempo.

Contrapunto de modernidad

Tal y como ha señalado José Manuel Barrio, director de la obra, el objetivo de la intervención ha sido doble. Por un lado, proteger la estructura e imagen de unas ruinas declaradas Bien de Interés Cultural, y por el otro, conjugar esa imagen con un “contrapunto de modernidad” que ya empezó a definirse tiempo atrás en el espacio adyacente con el proyecto de reforma de la biblioteca de San Juan.

En esta ocasión, la ejecución del proyecto ha sido sufragada en un 80 por ciento a través de los fondos del Plan Urban. El resto ha sido asumido por el Ayuntamiento, que, además, recibió el apoyo inicial de la Fundación Caja de Burgos y de La Caixa, que financiaron en su día la redacción del proyecto.

Visitas guiadas

Ahora, una vez finalizada la intervención, el alcalde ha querido invitar a todos los ciudadanos a conocer de primera mano el resultado de la misma. Para ello, el Ayuntamiento ha decidido mantener abierto el recinto “todos los días” hasta mediados del próximo mes de febrero. A partir de ahí, el objetivo pasa por desarrollar un completo programa de visitas guiadas en las que, además de los detalles de la obra, se explique la más que interesante historia del monasterio. Y todo ello planteado para establecer a partir de primavera un programa de actividades específicas en el recinto.