El tradicional belén de Renuncio se renueva en su 15º aniversario
Carlos García y Gustavo García presentan una nueva edición con 270 figuras y 40 construcciones, algunas echas a mano
La gran novedad es la fachada del templo de Luxor, elemento central de uno de los cuatro escenarios representados
Se ha actualizado la música ambiental y se ha añadido una nueva narración apoyada en un potente fuego de luces
Quince años llevan ya Carlos García y Gustavo García montando uno de los belenes más significativos de la Navidad burgalesa. Se encuentra en Renuncio, ocupa una superficie de 55 metros cuadrados y está compuesto por 270 figuras y 40 construcciones (algunas de ellas hechas a mano). Cuatro son los escenarios: Cueva de la natividad- Caravana de los Reyes Magos, Pueblo de Belén, Templo egipcio de Luxor y Cueva de huida a Egipto. Y para completar este proyecto familiar, efectos “especiales” de cambios de luz, niebla, hogueras con humo, agua hirviendo y figuras en movimiento.
Padre e hijo han aprovechado esta fecha redonda, el décimo quinto aniversario, para hacer una renovación “importante” de su belén. La Cueva de la Natividad se ha montado de nuevo, utilizando una técnica en la que se emplean exclusivamente trozos de madera, de tal modo que el resultado es de una apariencia “más auténtica”. La primera escena incluye también el nacimiento del río a través de la cascada y la “imponente” caravana de los Magos de Oriente, con una decena de camellos y “un guiño para los más pequeños de la casa”.
Los creadores quieren que el belén “esté lleno de vida”
Al Pueblo de Belén se han incorporado este año varias construcciones, para crear nuevos espacios, y también figuras y detalles “para conseguir que esté lleno de vida”. Las casas están echas a mano y distribuidas formando callejuelas. Entre ellas, se pueden encontrar diferentes oficios, como el de alfarero, el del herrero o el del carpintero. En la última parte de esa escena se encuentra el palacio de Herodes, enclavado en una gran montaña. Varios pastores cuidan de sus ovejas mientras el ángel les sorprende con la anunciación.
El gran templo de luxor
La tercera zona, la dedicada a Egipto, contiene la principal novedad de este año: la recreación de la fachada principal del templo de Luxor. Cuenta con unas dimensiones de 2 metros de ancho por 1 de altura y ha sido realizada en porexpan, escayola, barro, arena y madera. La fachada está adornada con motivos egipcios pintados. Cerca se ha representado el río Nilo, con un embarcadero y dos barcos egipcios que transportan mercancía. En la última escena, María y José con el niño Jesús huyen a Egipto a través de una gran cueva bajo la montaña. La representación ha requerido de casi 100 kilos de madera, con más de 15 puntos de luz.
Para que el visitante se sienta como si estuviera en el pueblo Belén, el local está decorado con un cielo estrellado gracias a centenares de hilos de fibra óptica de diferentes tamaños. Este año se ha renovado la música ambiental y se ha añadido una nueva la narración con un nuevo juego de luces. Para recrearlo se han empleado más de 1.900 Watios de potencia (100 más que el año pasado). El belén permanecerá abierto hasta el 6 de diciembre, de lunes a viernes en horario de 17:30 a 20:30, y los sábados, domingos y festivos, de 12:00 a 14:30 y de 17:30 a 20:30.