La falta de “continuidad” ha lastrado la creación de empleo en 2015, según FAE
El presidente de la patronal lamenta la falta de “continuidad” que ha tenido la recuperación económica a lo largo del pasado ejercicio
La FAE mantendrá en 2016 los mismos objetivos y buscará, entre otros, la creación de un Consejo de la Agroalimentación
La organización renovará el año que viene a toda su directiva
Miguel Ángel Benavente no ha desvelado si se presentará a la reelección. GIT
Burgos cierra el año en una situación más cómoda en términos generales que la que tenía de inicio, pero la tendencia podría haber sido más positiva. Esa es una de las principales conclusiones extraídas de la memoria del ejercicio presentada esta mañana por los responsables de la Confederación de Asociaciones Empresariales (FAE), cuyo presidente, Miguel Ángel Benavente, ha señalado que el 2015 ha sido “un año irregular” en el que “se ha generado empleo”, pero ha faltado “continuidad” en la recuperación económica. Así lo demuestran, de hecho, las estadísticas mensuales y trimestrales de empleo, que han arrojado datos positivos y negativos casi a partes iguales.
FAE confía en “aprovechar” el crecimiento de la economía que se prevé para el próximo ejercicio
FAE confía en “aprovechar” el crecimiento de la economía que se prevé para el próximo ejercicio
A partir de ahí, Benavente ha valorado la tendencia general acumulada en los últimos meses, en los que “se está reactivando todo”, ya sea a mayor o menor ritmo. Y eso, insiste, siempre es “positivo”. El reto ahora pasa por consolidar esa “recuperación” a lo largo de los próximos años, un objetivo que se antoja plagado de dudas debido a las innumerables variables que pueden entrar en juego. Por eso, ha añadido, es tan necesario “aprovechar” al máximo el crecimiento previsto para 2016 (alrededor de un 3 por ciento), que a medio plazo debería traducirse en creación de empleo de carácter más o menos estable. El devenir del próximo ejercicio marcará hasta cierto punto la capacidad de recuperación económica del país, ya que las previsiones para 2017 no son tan halagüeñas.
Sea como fuere, FAE seguirá trabajando en “defensa de los intereses de los empresarios”, que al final son “los que generan empleo”, ha subrayado Benavente. Para ello, la organización pretende mantener la línea de trabajo que viene desarrollando desde hace años, en base a encuentros sectoriales, interlocución con trabajadores e instituciones públicas, programas de formación, organización de foros empresariales, talleres de prevención y jornadas temáticas.
En este sentido, Benavente ha destacado varios de los objetivos concretos marcados por la directiva de FAE de cara a los próximos doce meses. Entre ellos destaca la intención de constituir un Consejo de la Agroalimentación en el que se integren todas las empresas vinculadas de alguna manera al sector y la mejora de la coordinación de intereses con las patronales vasca (Confebask) y madrileña (CEIM), que en definitiva comparten muchos objetivos, como la reapertura del Tren Directo. También se pretende profundizar en la participación colectiva en subastas de energía eléctrica y en la puesta en valor de la figura del empresario, así como en la redacción y puesta en marcha de un plan específico de prevención de la drogadicción en el trabajo.
Convenios
Y todo ello sin olvidar la consecución de uno de los principales objetivos de la patronal, como es la negociación de convenios colectivos. En esta materia, han quedado pendientes de 2015 la firma de los convenios de salas de cines y de la limpieza, un sector “muy complejo” por el volumen de trabajadores (más de 3.500 en la provincia) y por la dificultad para conciliar los intereses de todas las partes, incluyendo innumerables empresas pequeñas. Aparte de estos dos convenios, que aún siguen sobre la mesa, la FAE deberá afrontar la negociación del convenio del sector maderero, de los centros hospitalarios privados y de la elaboración de vinos y licores.
Además, la patronal burgalesa deberá encarar en 2016 un proceso electoral interno que permita dar relevo a la actual directiva. De momento, Benavente no ha querido desvelar si se presentará a la reelección, asegurando que todavía no se lo ha planteado. Eso sí, sea quien sea el próximo presidente, “la continuidad está asegurada” para una organización bajo cuyo paraguas confluyen los intereses de alrededor de 5.000 empresas de la ciudad y provincia, de las cuales 62 se han incorporado a lo largo de este ejercicio.