Los embalses burgaleses soportan la falta de lluvias del último mes

A pesar de la ausencia de precipitaciones durante el último mes, el agua embalsada en los pantanos del Ebro, Úzquiza o Arlanzón supera el 50 por ciento

En otras zonas del país ya se han producido las primeras restricciones de acceso al consumo de agua

Los embalses burgaleses soportan la falta de lluvias del último mes Vista aérea del pantano de Úzquiza en diciembre. "JARCHA"

Está siendo un otoño seco. La escasez de precipitaciones tiene a los agricultores mirando constantemente al cielo. Sin embargo, parece que la ausencia de lluvia no afecta a los embalses burgaleses. Tras uno de los veranos más cálidos y secos de las series históricas, ha llegado un otoño que no está siendo para tirar cohetes. A pesar de ello, tanto los embalses de la cuenca del Duero, Úzquiza y Arlanzón, como el del Ebro están soportando sin mayores dificultades este periodo carente de agua.

Comenzando por el embalse de Úzquiza, el nivel del embalse más importante para los ciudadanos de la capital está al 54,2 por ciento, lo que en hectómetros cúbicos se traduce en 40,7. Su evolución es descendente, sin embargo, la media de la última década (37,1 hm³) dice que está más de tres puntos por encima.

Por su parte, el embalse del Arlanzón se encuentra al 57,9 por ciento de su capacidad y su tendencia es ascendente. No obstante, hace un año, contenía 19,5 hectómetros cúbicos, cantidad muy superior a las 12,1 que posee hoy. Además, la cifra actual también está lejos de los 16,2 de media en la última década.

Cambiando de cuenca, el embalse del Ebro se mantiene equilibrado. Actualmente acumula el 55,89 por ciento de su capacidad, concretamente 301,7 hectómetros cúbicos. Esta cantidad es superior a la que contenía hace algo menos de un mes (21 de noviembre), cuando se encontraba al 51,87 por ciento.

En el ámbito nacional, Almería, Murcia o Córdoba son solo algunas de las provincias que han tenido que tomar medidas ante la reducción preocupante de su agua embalsada. España está sufriendo un año especialmente seco y es que en zonas del interior y sur peninsular, según datos de la Agencia Estatal de Meteorología, se han producido un 75 por ciento menos de precipitaciones en lo que llevamos de año. Esto ha dejado un deficit hídrico acumulado en esas zonas de un 25 por ciento.

Castrovido y su avance

A la red de embalses burgaleses se sumará en un plazo relativamente corto de tiempo el de Castrovido, cuya presa era visitada recientemente por la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina. Según la ministra, se cumplirán los plazos y en 2017 Burgos contará con un nuevo embalse de una capacidad máxima de 44 hectómetros cúbicos, lo que supone un paso intermedio entre los embalses de Arlanzón (22 hm³) y Úzquiza (75 hm³).

Imagen realizada por “JARCHA” www.fotosaereasjj.com