Otras dos detenidas por colaborar en el secuestro de la menor de Miranda

La Policía Nacional detiene en Miranda a otras dos mujeres acusadas de colaborar en la detención ilegal de la niña de 9 años

Varios testigos las sitúan en el punto de mira de las investigaciones

Agentes de la Comisaría de la Policía Nacional de Miranda han detenido a dos mujeres por su presunta colaboración en la detención ilegal de Alicia Pargaray, la niña de 9 años de edad que fue retenida contra su voluntad durante 14 horas en la vivienda de J.G.M., que el pasado lunes ya fue detenido por la misma razón. Según confirman fuentes de la Subdelegación del Gobierno, las detenciones se han producido tras recabar las declaraciones de los testigos y familiares de la menor retenida. Eso sí, de momento se desconoce el grado de participación de las dos mujeres detenidas.

La niña permaneció retenida durante 14 horas

En principio, está previsto que los tres arrestados pasen hoy a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Miranda, que se ha hecho cargo del caso en detrimento de la sala principal ya que era el que estaba de guardia cuando se registró el caso. El Juzgado ha decretado el secreto de las actuaciones y por el momento se desconoce el móvil del suceso.

Con estas dos nuevas detenciones se da un paso más en la investigación de un suceso que ha provocado una gran polémica en Miranda. El pasado domingo, la familia de la menor alertaba de su desaparición. A raíz de ese aviso se puso en marcha un amplio dispositivo de búsqueda que culminó a primera hora de la mañana del lunes en una vivienda de la calle Ciudad de Toledo.  Allí fue localizada maniatada en una silla y posteriormente puesta en libertad por su supuesto captor, J.G.M.

Mucha tensión

Sin embargo, el suceso no acabó ahí. Y es que, la familia de la niña, de etnia gitana, se movilizó para exigir venganza contra su supuesto raptor, miembro de otra familia gitana. De esta forma, en las cercanías de la vivienda se vivieron por la mañana momentos de mucha tensión, que acabaron con la entrada en la vivienda de varios efectivos del Grupo de Operaciones Especiales (Goes) de la Policía Nacional y el arresto de J.G.M.  

La mejor noticia es que la niña, que permaneció retenida contra su voluntad durante casi 14 años, no fue víctima de ningún daño físico. Así al menos lo ratificaron los facultativos sanitarios que la atendieron tras su liberación.