2-1- El Mirandés se crece en la Copa
El Mirandés vence al Málaga en la ida de los dieciseisavos de final gracias a sendos goles de Álex García y Lago Junior
La eliminatoria está totalmente abierta para el partido de La Rosaleda
El Mirandés no ha conseguido ganar en los últimos tres desplazamientos. LFP
El espíritu de Anduva ha regresado. O quizá nunca se fue, simplemente estaba durmiendo. El Mirandés avanzó esta noche en su camino en la Copa del Rey tras vencer al Málaga en la ida de los dieciseisavos de final tras un partido en el que los rojillos fueron superiores en líneas generales a todo un Primera División que, eso sí, se plantó en Miranda plagado de urgencias. La peor noticia es que los hombres de Terrazas no consiguieron cerrar la eliminatoria y todo queda visto para sentencia en el partido de vuelta, que se disputará dentro de quince días en La Rosaleda.
Ficha Técnica
2 – CD Mirandés: Raúl; Gaffoor, Álex Ortiz, Corral; Moreno, Lázaro, Carnicer (Kijera, min.46), Provencio; Ion Vélez, Abdón Prats (Sangalli, min.56), Álex García (Lago Junior, min.56).
1 – Málaga CF: Ochoa; Torres, Albentosa, Filipenko, Boka; Horta (Cop, min.82), Juanpi (Fornals, min.72), Tissone, Tiga (Ontiveros, min.72); Espinho, Santa Cruz.
Goles: 1-0, min.34: Álex García; 1-1, min.55: Santa Cruz; 2-1, min.68: Lago Junior.
Árbitro: Sánchez Martínez (Colegio Murciano). Mostró tarjeta amarilla a los jugadores locales Carnicer y Lázaro y al visitante Tiga.
Incidencias: Partido correspondiente a la ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey disputado en Anduva ante 2.639 espectadores.
Saltó el Mirandés al césped de Anduva como siempre. Sin miedo. El hecho de tener enfrente a un rival de superior categoría no modificó ni un ápice la propuesta de Terrazas, que en la previa ya avisó de que entre ambos equipos no había tanta diferencia como a priori cabría esperar. Y eso a pesar de introducir hasta siete cambios respecto a la última jornada. Esas modificaciones apenas se notaron una vez que el balón comenzó a rodar.
Fiel a su estilo, el Mirandés intentó -y consiguió por momentos- imponer su estilo ante un rival que llegaba a Anduva en plena crisis de juego y resultados. Los malacitanos andan en puestos de descenso y tardaron en enchufarse al partido. Eso sí, la calidad de los hombres de Javi Gracia es indiscutibe y ya en el minuto cinco pudieron abrir el marcador merced a un disparo de volea de Tiga que se estrelló en el larguero. Aquella fue la mejor, y casi la única ocasión de peligro del Málaga en la primera parte.
En realidad, no ofreció mucho más el Mirandés, que a pesar de dominar el tempo del partido a base de presión, velocidad en el despliegue y las coberturas y generosidad entre líneas, no consiguió inquietar de verdad a Ochoa. Así fue, al menos, hasta el minuto 34. Fue entonces cuando llegó el gol. Y lo hizo, curiosamente, como menos se esperaba: a balón parado. Los espigados defensas del Málaga no acertaron a despejar un saque de esquina que apenas llevaba peligro y la pelota caía a los pies de Álex García, que no perdonaba y ponía el 1-0 en el marcador.
Poco más dio de sí la primera parte, que se cerró con la sensación de que el Mirandés, efectivamente, podía ganar al Málaga. Sin embargo, el conjunto malacitano tardó poco en devolver la lógica al marcador. En el 46, Horta, quizá el mejor de los andaluces junto a Santa Cruz, estrelló un balón en el palo. Ese fue el segundo de la noche, pero no el último. Y es que, apenas 5 minutos después, el propio Santa Cruz volaba para rematar de cabeza un buen centro de Espinho que volvía a encontrarse con el poste en su camino. Sin embargo, en esta ocasión, la pelotita volvió a los dominios del delantero paraguayo, que no perdonó y puso el empate en el marcador.
Fue entonces -minuto 55- cuando Terrazas decidió jugarse el todo por el todo, gastando todos sus cambios y dando entrada a Lago Junior y Sangalli. Y la apuesta le salió a pedir de boca. En el 68, y después de un par de acercamientos de cierto peligro, Sangalli colgaba un centro al segundo palo y por allí aparecía Lago para rematar, batir por bajo a Ochoa y volver a poner en ventaja al Mirandés, que seguía viéndose capaz de, por lo menos, ganar el partido. Lo de pasar la eliminatoria, ya se verá en La Romareda.
De momento, los rojillos han dejado los deberes hechos de cara al partido de dentro de quince días. De hecho, el Mirandés pudo dejar la eliminatoria casi vista para sentencia si Corral llega a acertar con un remate en el descuento que se marchó fuera por centímetros. Sea como fuere, una cosa está clara. El Mirandés tiene ventaja y el Málaga tendrá que ganar si quiere pasar de ronda, lo que obligará al conjunto andaluz a arriesgar más. Mientras tanto, los de Terrazas, crecidos tras la victoria de esta noche, deberán empezar a pensar en el choque del próximo domingo en Huesca.