La candidatura de Ciudad Creativa en Gastronomía va superando etapas
Los responsables del proyecto se lo presentarán mañana a la embajadora de España ante la UNESCO a la espera de que el organismo decida
Se calcula una inversión de 150.000 euros para llevar a cabo el proyecto si finalmente se recibe la declaración por parte de la UNESCO
La suerte está echada. Antes de final de año, la UNESCO repartirá nuevas declaraciones de Ciudades Creativas y Burgos podría ser una de ellas. Así al menos lo esperan los responsables del proyecto ‘Motores Humanos’, con el que la capital provincial intentará conseguir el marchamo de Ciudad Creativa de la Gastronomía, una suerte de sello de calidad que hasta ahora sólo comparten 7 ciudades en todo el mundo y que podría suponer un nuevo revulsivo para el sector gastronómico.
La candidatura fue presentada de manera oficial ante la UNESCO este pasado verano y se decidirá antes de final de año
La candidatura fue presentada de manera oficial ante la UNESCO este pasado verano y se decidirá antes de final de año
Tal y como ya adelantara el Ayuntamiento meses atrás, el proyecto, en el que se mezcla gastronomía, salud y evolución, ya está en manos de los técnicos de la UNESCO y mañana lo estará en las manos de la nueva embajadora de España ante el organismo internacional. A partir de ahí, se prevé que a lo largo de las próximas semanas se lleve a cabo el análisis de la candidatura y se pueda avanzar en la decisión. En todo caso, la hipotética declaración debería llegar antes de final de año, según el calendario de la propia UNESCO. De momento, se desconoce qué otras ciudades pueden haber presentado proyectos, aunque se habla de alguna italiana, de Hondarribia o de Denia.
Sin embargo, ninguna de ellas presenta un proyecto como el de Burgos, que a la espera de saber si es mejor o peor, lo que está claro es que es diferente. Único. Así lo destacan de manera insistente sus responsables, que explican cómo se han unido conceptos gastronómicos y evolutivos, dos de los principales recursos con los que cuenta la ciudad y su entorno más cercano. Para ello, hace casi un año se formó un grupo de trabajo en el que están presentes 35 profesionales de diferentes sectores, incluyendo el Ayuntamiento, la UBU, la Asociación de Hosteleros, el CENIEH, el Colegio de Médicos o varios cocineros burgaleses.
Entre todos ellos se ha gestado un proyecto basado, fundamentalmente, en tres grandes apuestas, como son la creación de un Laboratorio Mundial sobre la Evolución Gastronómica, la puesta en marcha de un ‘Distrito Gastronómico” y el desarrollo de un programa de Gastronomía Solidaria. Todo ello complementado con la redacción y ejecución de un plan de industrias creativas y el aprovechamiento de la experiencia obtenida a través de la pertenencia de la ciudad a la red europea de Gastronomic Cities.
150.000 euros
En principio, la puesta en marcha de todo el conjunto de actuaciones contempladas en el proyecto supondrá la inversión de alrededor de 150.000 euros que se pretenden consignar a través de la colaboración público-privada. En este sentido, el alcalde de la ciudad, Javier Lacalle, ha asegurado hoy que ya se ha negociado y confirmado la participación de parte del sector privado de la ciudad en caso de que el proyecto obtenga la declaración.
De momento, y a la espera de la valoración de la propuesta burgalesa, sus promotores ya han obtenido 55 apoyos explícitos al proyecto, entre los que se incluyen el de la Asociación Eurotoques -con Pedro Subijana a la cabeza-, de la organización de la Capital Española de la Gastronomía -título que ostentó Burgos en 2013- y del Ministerio de Asuntos Exteriores. Ahora, la pelota está en el tejado de la UNESCO.