Las BRIF suspenden la huelga para debatir si continúan negociando con Tragsa
La última reunión en el SIMA ha permitido elaborar un documento con las propuestas que están más “próximas”
Los sindicatos lamentan que la empresa haya resucitado el requisito de disponibilidad, vinculándolo a la subida salarial
Las bases decidirán ahora si el texto es “suficiente” para mantener las negociaciones o se rompen definitivamente
Las BRIF realizan labores de extinción pero también de prevención. MAGRAMA
No se le puede llamar un acuerdo de “mínimos” ni “preacuerdo”. Oficialmente se denomina “acta de emplazamiento” y recoge las propuestas en las que las BRIF y Tragsa están más próximas, tras dos jornadas de intensas negociaciones con los mediadores del SIMA, en las que se han vivido algunos momentos “tensos”. Un documento que será presentado y explicado a los trabajadores de las Brigadas de Refuerzo contra Incendios Forestales a partir del próximo lunes y que permite “paralizar”, que no suspender, la huelga indefinida, con más de un centenar de jornadas a sus espaldas.
No tiene sentido continuar con los paros totales si ahora toca reflexionar sobre lo ocurrido en las reuniones con el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA), asegura Jorge Nieto, de CC.OO. El primero de los encuentros tuvo lugar el jueves y se cerró con la presentación, por parte de los sindicatos, de su propuesta sobre 2ª actividad, categoría profesional y retribuciones salariales. La pelota pasaba entonces al tejado de Tragsa, que debía concretar ayer cuáles de los planteamientos de los trabajadores estaba dispuesta a asumir, cuáles requerían una revisión y cuáles eran inaceptables.
El colectivo siente que Tragsa ha “jugado” con ellos al vincular la subida salarial a la disponibilidad
Para sorpresa del comité negociador, asegura Nieto, la empresa volvió a poner sobre la mesa el requisito de la disponibilidad para justificar un incremento del 11 por ciento en la masa salarial. Los sindicatos creían que, tras la última oferta presentada, el tema de la disponibilidad estaba cerrado. Sin embargo, Tragsa aseguraba que había habido un “malentendido”. Así las cosas, la oferta final de la empresa pasaría por esa subida salarial, a cambio de que los trabajadores estén totalmente disponibles una semana de cada seis, y no una de cada tres como exigían inicialmente. Nieto reconoce que el colectivo siente que “han jugado con nosotros”.
Sin embargo, a pesar de este revés, las BRIF habrían conseguido que Tragsa acepte darles un 70 por ciento de la formación asociada a la categoría de bomberos forestales, en horario laboral. Visto que no aceptan un reconocimiento de esa categoría, y que sólo están dispuestos a redenominarles como brigadistas forestales, los trabajadores proponían una solución intermedia, que pasaba por recibir esa formación específica. Y así se recoge en el documento, en el que también aparece el acuerdo sobre la creación de una 2ª actividad, tal y como se había pactado hace ya algunas semanas.
A las bases
Estos planteamientos, pero debidamente explicados, se presentará en las bases a partir del lunes. Teniendo en cuenta que la siguiente reunión con el SIMA no será hasta el 17 de noviembre, el comité negociador utilizará las próximas jornadas para reunirse con los trabajadores, explicarles el contenido del documento, analizar pros y contras… Todo ello con el objetivo de que se tome una decisión sobre cuál es el paso siguiente. Si los trabajadores consideran “suficiente” la propuesta, se continuará negociando con Tragsa. Si no es así, se podrían romper las negociaciones y buscar alternativas para conseguir sus reivindicaciones.
Jorge Nieto insiste, una vez más, en que todo está en manos de las bases. El comité negociador no va a tomar ninguna decisión, aunque sí es el que está proponiendo suspender la huelga indefinida para dedicarse a estudiar ese documento, que es lo más cercano a un acuerdo que han conseguido. Sin embargo, nada impide que la movilización pueda reactivarse, sí así lo consideran los trabajadores. Mientras, continúan llegando muestras de apoyo de la sociedad, que ha respondido con mucho cariño a un colectivo que reivindica una mejora de sus condiciones laborales.