Desarticulado un grupo criminal dedicado al robo con fuerza en viviendas
Policía Nacional ha detenido a dos personas que se dedicaban a robar en viviendas unifamiliares de la capital
Los agentes recibieron un aviso de una central de alarmas y pudieron sorprenderles en plena acción
Se les imputan 26 hechos de similares características ocurridos durante los últimos meses en Burgos
Policía Nacional ha desarticulado en Burgos un grupo criminal itinerante especializado en robo con fuerza en viviendas. La operación, que ha concluido con dos detenciones, se enmarca en un dispositivo de prevención establecido desde hace meses en la capital burgalesa, después de que se detectasen varios robos con fuerza ocurridos en chalets y casas unifamiliares y adosadas, de planta baja. Las viviendas estaban ubicadas en diferentes urbanizaciones de la ciudad, tanto en barrios perimetrales como en zonas más céntricas, explican desde la Comisaría de Burgos, a través de una nota de prensa.
La operación se puso en marcha cuando el 091 recibió un aviso de una central de alarmas. Los agentes acudieron rápidamente al domicilio afectado, lo que les permitió sorprender a los dos detenidos cuando intentaban robar en una vivienda, aprovechando que era de noche. Habían escalado la valla que rodeaba la propiedad y habían forzado una de las ventanas. La detención se produjo tras sendas persecuciones, después de que los sujetos saliesen corriendo del lugar de los hechos y tratasen de ocultarse en viviendas próximas.
26 delitos
Finalmente, los agentes de la Policía judicial, apoyados por indicativos uniformados, lograron detener a los dos individuos. Durante la huida, los dos sujetos fueron desprendiéndose del material que portaban, arrojándolo a la vía pública. En concreto, se intentaron deshacer de destornilladores grandes, linternas, guantes, teléfonos móviles y 295 euros en efectivo. Tras las investigaciones oportunas, Policía Nacional ha podido determinar la participación de los dos sujetos en 26 hechos de naturaleza similar, que desarrollaban con una periodicidad de entre dos y tres veces al mes.
Los robos en las viviendas acababan con la desaparición de joyas, dinero en efectivo y pequeños aparatos electrónicos de fácil venta en el mercado ilícito. Se trata de un grupo de organizado dado que seleccionaban las viviendas que no tenían luces encendidas y en breve espacio de tiempo realizaban su acción. Eran capaces de detectar la presencia de agentes de Policía, dado que uno de los miembros se dedicaba a vigilar, mientras el otro estaba cometiendo el delito. Los detenidos, con numerosos antecedentes de idéntica naturaleza en nuestro país, fueron puestos a disposición de la Autoridad Judicial.