‘Nuevo Futuro’ busca la solidaridad burgalesa a través de un rastrillo
Miles de objetos a precios populares podrán comprarse hasta el domingo en el Monasterio de San Juan
La recaudación se destinará a sufragar los gastos de los 18 niños a los que atiende la asociación en sus tres viviendas
Comprar por una buena causa puede ser un buen eslogan para el rastrillo anual de la Asociación de Hogares para Niños Privados de Ambiente Familiar ‘Nuevo Futuro’, que busca atraer a los burgaleses al Monasterio de San Juan para hacerse con objetos que otros han donado, pagando por ellos a partir de un euro. Esta iniciativa surge ante la necesidad de buscar financiación para sufragar los gastos de las tres viviendas -dos en la capital y una en Aranda-, que tiene la asociación, y los 18 niños a los que atiende.
Objetos de toda índole y condición se pueden encontrar en los numerosos puestos que atienden voluntarios de la asociación y que estarán abiertos hasta el domingo, en horario de mañana y de tarde. Sin duda, el común denominador de todo lo que se puede adquirir en el rastrillo solidario es su reducido precio. Además, la entrada para visitarlo es gratuita.
Aunque es difícil prever la recaudación que se conseguirá a lo largo de estos cuatro días de apertura, la organización se fija la cifra de 13.000 euros que se consiguió la pasada edición, como referencia para medir el éxito de la actual convocatoria.
Este rastrillo es solo un pequeño campo de acción de ‘Nuevo Futuro’, quien centra todos sus esfuerzos en dar salida a niños desprotegidos que han quedado huérfanos o viven en un ambiente familiar negativo por violencia o necesidad. La presidenta de la asociación, Josefina Martín Verdugo, explica cómo los niños, entre los 5 y los 18 años, salen adelante con la tutorización de los doce educadores -cuatro por vivienda- y una psicóloga que trata de responder las incertidumbres que se ciernen sobre ellos.