La rehabilitación del tejado de Bernardas, a falta de la firma del contrato
La empresa Haral 12 Servicios y Obras ejecutará los trabajos por 151.742 euros, casi un 36% por debajo del precio de licitación
Dispone de tres meses para concluir un proyecto que estará financiado con cargo al Plan Municipal de Inversiones Sostenibles
Se realizará un retejado completo para acabar con los problemas de goteras y humedades que se sufren desde hace tiempo
El Ayuntamiento de Burgos está a punto de firmar el contrato con Haral 12 Servicios y Obras S.L, empresa adjudicataria del proyecto de rehabilitación de la cubierta del Convento de Bernardas. La mercantil se encargará de las obras, consistentes en un simple retejados para acabar con los problemas de goteras, filtraciones y humedades, por 151.742 euros. Eso supone una rebaja de casi el 36 por ciento con respecto al precio de licitación, de 236.764 euros. Dispondrá del plazo de tres meses para ejecutar las obras, que está previsto que se financien con fondos del Plan Municipal de Inversiones Sostenibles.
La adjudicación definitiva de la obra se firmó el pasado 6 de octubre y, tras pasar por la correspondiente Junta de Gobierno Local, ahora sólo falta que se firme el contrato para poder iniciarse los trabajos. Fernando Gómez, el presidente del Instituto Municipal de Cultura y Turismo, confía en que dicha firma llegue en los próximos días, para que los trabajos puedan comenzar cuanto antes. Y es que, al igual que le ocurre a la remodelación del Parque de San Isidro, el proyecto debería estar concluido para el 31 de diciembre, aunque el Ministerio de Hacienda permitirá concluir las obras financiadas con superávit municipal en los primeros meses de 2016.
Un problema que viene de lejos
El proyecto supone la realización de un retejado total de la cubierta de Bernardas, tras múltiples parcheados que no han acabado con el problema real de serio deterioro de la infraestructura. La voz de alarma la daba el PSOE hace un año, cuando afirmaba que el uso público de la instalación, en la que se ubica la Escuela Municipal de Música, no era seguro. Aunque el presidente del IMC negaba este extremo, reconocía que era necesaria una nueva intervención, que acabase con las goteras, humedades y filtraciones, las mismas que han impedido el uso de las aulas del último pisos durante los recientes cursos académicos.
Los técnicos se ponían entonces a elaborar un informe, para determinar el estado real de la cubierta del convento, decretando que los retejados puntuales que se habían realizado hasta entonces eran insuficientes. Nacía así el proyecto de rehabilitación completa de la cubierta. Para su financiación, el IMC lo incorporó a las ayudas del 1,5 por ciento Cultural del Ministerio de Fomento, pero como la solicitud era rechazada, finalmente las obras tendrán que pagarse a través del superávit municipal de 2014. Los trabajos no impedirán que continúen las clases de la Escuela Municipal de Música.